Con la llegada de la época de calor, se vuelve indispensable almacenar correctamente los alimentos para que estos no se echen a perder con las altas temperaturas, sobre todo si se trata de frutas y verduras que no pueden ir dentro del refrigerador. Por eso, esta vez te daremos algunos consejos que debes tener en cuenta para guardar adecuadamente estos alimentos.
Busca lugares frescos y secos para guardarlas
Dado que estos alimentos tienen que almacenarse fuera del refrigerador, debes buscar un lugar fresco y seco donde colocarlos. Recuerda que evitar la humedad es indispensable para que las frutas se mantengan en buen estado por mucho más tiempo. Así que el espacio donde las coloques deberá estar libre de este factor para evitar que el proceso de echarse a perder comience.
Usa recipientes adecuados que eviten la humedad
Los recipientes que utilices para guardar estos alimentos también cobran mucha relevancia. Deben ser de materiales duraderos como el plástico o el vidrio, y además, tienen que permitir el flujo de aire correctamente. Esto evitará que la humedad se acumule lo suficiente como para empezar a pudrir las frutas. Evita las bolsas de plástico o cerrar completamente tus recipientes para que así el aire circule sin problema.
No dejes los alimentos expuestos a la luz del sol
Es necesario que, al momento de escoger el lugar donde vas a colocar tus frutas para que se mantengan en buen estado, evites el contacto directo con los rayos del sol. Esto puede aumentar la temperatura, elevar la humedad y causar problemas en tus frutas o verduras, haciendo que se pudran mucho más rápido. Si es posible, colócalas en un lugar oscuro con las características antes mencionadas.
Lava y deja secar muy bien la fruta antes de guardarla
Por último, es muy importante que laves y seques muy bien tus frutas antes de guardarlas en recipientes. Puedes dejarlas secar al aire o utilizar papel absorbente para eliminar completamente la humedad de la superficie de los alimentos. Ya que si queda algún rastro de líquido en ellos, es posible que la humedad acelere el proceso de putrefacción.
