Remueve la grasa de tu estufa con esta sencilla mezcla de ingredientes

Llega el fin de semana y entonces toca hacer limpieza a profundidad ¡de todo! Eso incluye la cocina a la que muchas veces arrastramos nuestros piecitos para lograrlo, porque sabemos que no sólo es barrer, trapear y lavar trastes, sino que la higiene en su interior incluye limpiar el refri o peor aún: La estufa. 

Para lograr limpiar la estufa debes de remover la grasa, que es lo que nos garantizará que quede como nueva. Por esa razón es que en esta ocasión queremos decirte cómo puedes lograrlo de forma increíble y fácil, con ayuda de una solución que puedes crear en la comodidad de tu casa, así que puedes ponerte ¡manos a la obra!

Existen muchas razones por las cuales se acumula grasa en tu estufa y una de las más comunes son los residuos cuando freímos algún alimento y por eso es que cuando cocinamos, los aceites, grasas y residuos de alimentos se liberan en forma de vapor y salpicaduras, y algunos de estos residuos pueden terminar depositándose en la superficie de la estufa.

¿Cómo quitar las manchas de grasa de la estufa?

Existen muchas maneras de hacer remedios para limpiar las estufas, pero en esta ocasión, el protagonista, como en muchos otros remedios es el bicarbonato de sodio, que es el rey para quitar todas las manchas difíciles de prácticamente cualquier superficie y en este caso, pues no será la excepción. 

¿Qué necesitas?

• Bicarbonato de sodio 
• Agua caliente
• 2 tazas de limpiador de piso 
• 1 taza de vinagre
• 3 cucharadas de jabón para trastes

Para lograr tu limpiador y desengrasante de la estufa debes de poner en un recipiente 1 cucharada de bicarbonato de sodio, 1 taza de agua caliente y esperar a que se disuelva todo y una vez que lo logres, vierte en una botella, donde después, con ayuda de un embudo, agregarás el limpiador de piso, el jabón de trastes y el vinagre. Agita o mezcla muy bien. 

Ahora, rocíalo con ayuda de un aspersor sobre tu estufa y con ayuda de una esponja o fibra que no ralle, retira los excedentes de jabón y grasa. Limpia con un trapo la estufa y luego enjuágalo para que no se embarre la grasa. Seca con un trapo limpio de microfibra para evitar las manchas de agua ¡y listo!