Ya casi llega la primavera y aunque ya la empezamos a sentir, quizá algunas personas no hemos contemplado los cuidados para nuestros árboles frutales, tanto los que se nutren ahora para dar fruto después o los que entran en temporada de cosecha y por esa razón es que hoy queremos decirte cómo hacer un abono casero con ingredientes de cocina.
Este abono casero ayudará a que tu árbol de mandarinas explote de frutos cuando llegue nuevamente la temporada y prepararlo ahora garantizará que crezca y se desarrolle tan bien, que cuando sea el momento de floración y fructificación esté en su máximo esplendor y te sorprenda con una cosecha que nunca antes has visto.
Los abonos son básicamente una mezcla de nutrientes orgánicos e inorgánicos que se aplican al suelo alrededor de los árboles frutales para proporcionar todo lo necesario para un crecimiento saludable y una producción óptima de frutas. Este elemento proporciona sustancias esenciales como el nitrógeno, fósforo, potasio y otros micronutrientes.
¿Cuándo es la temporada de mandarina en México?
Las mandarinas son un fruto popular sobre todo en las festividades de Día de Muertos y las posadas. Sin embargo, su temporada comienza en octubre y se extiende hasta marzo, lo cual quiere decir que durante este mes estaremos despidiendo la larga temporada de cosecha de los árboles de mandarina.
¿Qué necesitas?
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Cáscaras de huevo
- Cáscaras de plátano
- Cáscaras de naranja o mandarina
- Agua
Instrucciones:
- Lava las cáscaras de huevo para eliminar cualquier residuo de huevo restante. Luego, deja secar las cáscaras al aire durante unos días hasta que estén completamente secas y crujientes.
- Tritura las cáscaras secas en trozos pequeños. Puedes usar un mortero y una maja o una licuadora para hacerlo más rápido.
- Coloca las cáscaras trituradas en un recipiente grande, como un cubo o una botella de plástico reciclada.
- Agrega cáscaras de plátano y cáscaras de naranja o mandarina al recipiente. Estas cáscaras aportarán nutrientes adicionales y ayudarán a mejorar la estructura del suelo.
- Cubre las cáscaras con agua y mezcla bien todos los ingredientes.
- Tapa el recipiente y deja reposar la mezcla durante al menos una semana. Durante este tiempo, los nutrientes de las cáscaras se liberarán en el agua, creando un abono líquido casero.
- Después de una semana, cuela la mezcla para separar el líquido del sólido. El líquido resultante es tu abono casero.
- Diluye el abono líquido con agua en una proporción de aproximadamente 1 parte de abono por 10 partes de agua.
- Vierte el abono diluido alrededor de la base de tus árboles de mandarina, evitando que entre en contacto directo con el tronco del árbol.
