Con la llegada de marzo también entramos en la temporada de primavera, y estos días son perfectos para comenzar a cultivar tu propio aguacate si deseas iniciar el cuidado de este árbol frutal. Para ello, primero necesitarás germinar la semilla del aguacate, y nosotros te diremos cómo hacerlo para que tengas éxito.
Extrae la semilla del aguacate con mucho cuidado
Lo primero que debes hacer es extraer la semilla del aguacate con mucho cuidado y sin dañarla. Asegúrate de que la semilla no tenga manchas, golpes, rasguños o rajaduras. Una vez que hayas extraído la semilla, deberás limpiarla para eliminar toda la pulpa. Puedes enjuagarla suavemente con agua y estará lista para continuar.
Prepara un soporte para la semilla de aguacate
Ahora necesitarás hacer un pequeño soporte para colocar tu semilla de aguacate flotando en un vaso. Esto se puede lograr clavando algunos palillos en la semilla, formando una cruz. Estos palillos ayudarán a sostenerla justo encima del borde del vaso, evitando que la semilla se sumerja completamente en el agua.
¿Cómo germinar fácilmente una semilla de aguacate?
Coloca la semilla en el vaso apoyándola en el borde y llena el recipiente con agua, solo hasta cubrir la mitad de la semilla. Esto es crucial para fomentar el crecimiento de las raíces sin riesgo de pudrición. Recuerda que el lado más angosto de la semilla debe ir hacia arriba, ya que es de aquí de donde saldrá el tallo, mientras que el lado más grueso deberá ir sumergido en el agua para que se generen las raíces.

Cuidados que debes brindarle a tu semilla de aguacate
Ubica tu semilla en un lugar donde reciba luz solar directa y cambia el agua cada tres días para evitar la proliferación de microorganismos dañinos. Después de un par de meses, tu planta alcanzará aproximadamente los 15 cm de altura, momento en el que podrás trasplantarla a una maceta. Después de algunos años, tu árbol de aguacate comenzará a producir sus primeros frutos.