Cuando se trata de la cena de Navidad, uno de los ingredientes que no puede faltar en nuestras preparaciones es el bacalao noruego. Para elaborar la enorme gama de platillos que se pueden hacer con este pescado, primero se debe limpiar correctamente, pues se trata de un producto cubierto de sal. Si no se maneja adecuadamente, nuestra cena de Navidad puede quedar muy salada. Aquí te enseñaremos cómo quitarle la sal adecuadamente y te explicaremos qué pasos necesitas seguir para limpiarlo de forma correcta.
El bacalao noruego que se suele utilizar en la cena navideña es un producto semi deshidratado que se conserva cubierto con sal para mantenerlo en buen estado. Gracias a este método, el bacalao se mantiene libre de bacterias y microorganismos. Sin embargo, es necesario lavarlo previamente para que la carne pierda toda la salazón que se le adhiere durante el proceso de manejo.
Toma en cuenta que este proceso lleva varios días, así que deberás tener paciencia y aplicarlo antes de empezar a preparar tu cena de Navidad. La limpieza y el desalado del bacalao noruego requiere que remojemos el pescado en agua fría, pero este proceso deberá repetirse por tres días. Así que toma este detalle en cuenta para realizar la limpieza del bacalao a tiempo y que quede listo para tu cena navideña.

Cómo limpiar bacalao noruego
Lo primero que deberás hacer será colocar un poco de agua con hielos en un recipiente amplio que sea lo suficientemente grande para contener todo tu bacalao. Cuando el hielo se haya derretido y el agua esté bien fría, coloca el pescado dentro sin remover. Lleva esta preparación al refrigerador y déjalo reposar por 24 horas. Después de este tiempo, retira por completo el agua, cuidando de no desbaratar el pescado.
Una vez que hayas retirado toda el agua salada, deberás volver a colocar agua fría. Esta tendrás que mezclarla con hielo previamente para que tenga la temperatura adecuada. Si prefieres, puedes ahorrarte el paso de enfriar el agua utilizando agua fría directa de tu refrigerador. Puedes prepararla un día antes junto con el bacalao para que, al momento de utilizarla, ya tenga la temperatura correcta. Una vez que hayas cubierto tu bacalao con la nueva porción de agua limpia, déjalo reposar por 24 horas más.
Limpieza final
Repite el proceso de limpieza con agua limpia un día más. En total, serán tres días los necesarios para que el bacalao noruego repose en agua y la sal vaya saliendo poco a poco del pescado. Una vez que esté listo, elimina el agua y sécalo con ayuda de papel absorbente. Notarás cómo tu pescado se ha rehidratado, estará suave y, si lo pruebas, el sabor a sal será mínimo. Comienza a quitar las espinas, y estará listo para que lo utilices en tus platillos.