Es común que al momento de cocinar un delicioso caldo de pollo, la proteína conforme va avanzando el proceso de cocción, suelte una especie de espuma blanca o gris que se coloca sobre el borde de la olla generando una fina capa blancuzca. Pero, ¿a qué se debe esto ó es una señal de que algo no está saliendo bien en la cocina?, no te preocupes, aquí te explicamos por qué sucede.
¿Qué pasa si el caldo de pollo tiene burbujas? La espuma de la preparación
Lo primero que es importante aclarar es que esa espuma o serie de burbujas que se comienzan a formar sobre la preparación NO significa una descomposición o un factor negativo de la proteína de origen animal. Así que si al momento de cocinar un caldo de pollo este comienza a formar esa espuma blanca o gris, no hay porque entrar en pánico pensando que algo malo está pasando en la cocción.
A pesar de que la aparición de la espuma blanca al hervir el pollo es normal, si no es retirada del caldo, esta puede terminar por amargar la preparación o en el peor de los casos o echarla a perder más rápido con el paso de los días. Lo recomendable es que una vez que comience a formarse esta capa blanca, se tiene que retirar de poco a poco con ayuda de una cuchara.
¿Por qué la carne suelta espuma?
La carne de pollo suelta espuma al cocinarla porque las proteínas disueltas en el agua que pierde se combinan con el aire y forman burbujas. Este proceso suele acelerarse cuando el caldo se cocina a fuego bajo, haciendo que se pierda más agua a un proceso más lento, lo que propicia la aparición de burbujas.
De acuerdo con el Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo (CIAD), por la acción del calor, el agua contenida dentro de las fibras musculares sale acompañada de otros componentes, llevando consigo dichas proteínas, haciéndose visibles en forma de espuma burbujeante.
Los especialistas aseguran que comúnmente las personas asocian la presencia de espuma en los alimentos de origen proteico como una señal de descomposición que genera alarma y propicia la teoría de que puede ser un elemento que afecta la salud del consumidor, sin embargo esto es completamente erróneo, pues si la carne se encuentra en buenas condiciones al momento de hervirla, la espuma que se genere en la preparación no puede causar problema alguno.
¿Qué hacer con la espuma del caldo de pollo? Para evitar que la presencia de burbujas genere un sabor amargo o simplemente propicie una apariencia no agradable, cuando la preparación aún se encuentra en estado de ebullición, hay que retirar esa capa blanca con ayuda de una cuchara amplia y desechar la espuma. Así de sencillo es tener un caldo de pollo mucho más limpio y claro, con una apariencia totalmente agradable.
Recuerda que la presencia de espuma blanca o gris al momento de cocinar un caldo de pollo, es completamente normal, pues esta comienza a liberar nutrientes (principalmente proteína) que se integran a la espuma. Según el CIAD, la cantidad de estos no es importante, por lo que al retirarla no se afecta considerablemente su valor nutricional. No obstante, la decisión de retirarla o no, se deja a consideración del consumidor.
