El comienzo de diciembre marca el último tramo del año y la llegada del invierno. ¿Qué mejor época que esta para realizar un ritual que ayude a limpiar la energía del hogar y preparar tus espacios para despedir el año de forma positiva? Por ello, te enseñaremos a preparar un ritual con sal, ideal para permitir que nueva energía entre a tu casa, eliminando todas las malas intenciones acumuladas durante el año. ¿Quieres saber cómo hacerlo? Sigue leyendo.
En muchas culturas, la sal es un símbolo importante de protección y limpieza. Este ingrediente se utiliza para realizar numerosos rituales y amuletos que ayudan a purificar la energía, dar espacio a las bendiciones y protegerte de la envidia y otros efectos negativos. Lo mejor es que para este ritual solo necesitarás tres elementos: sal, agua y una vela blanca.
Para este ritual, es ideal usar sal gruesa o sal marina, que disolveremos en agua tibia frente a una vela encendida. Aunque este procedimiento es perfecto para realizarse el primero de diciembre, también puedes hacerlo en cualquier época, especialmente cuando lleves a cabo una limpieza profunda en casa. Este ritual es ideal para renovar los espacios y liberar la energía acumulada en el hogar.
Ritual de sal para limpiar energía
Ingredientes
- 1 vaso de agua
- 1 cucharada de sal marina o sal gruesa
- 1 vela blanca
Pasos
- Enciende la vela y coloca el vaso de agua frente a ella.
- Agrega la sal al agua y disuelve con una cuchara, haciendo movimientos circulares.
- Una vez que la sal esté mayormente disuelta, coloca el líquido en una botella con atomizador.
- Rocía el agua en el piso, las entradas de tu hogar, las ventanas, los portales y las esquinas de las habitaciones.

Recomendaciones
Es muy importante que rocíes el agua en esquinas y detrás de las puertas, ya que es en estos lugares donde se suele concentrar las malas energías. Recuerda que la intención es muy importante al realizar rituales, así que al hacerlo mantén en mente la limpieza de energía y la llegada de efectos positivos a tu vida. Puedes realizar este ritual a cualquier hora del día pero es recomendable hacerlo justo al atardecer para aprovechar la energía del momento y recuerda siempre apagar la vela después de usarla.