Día de Muertos

¿Se pueden comer los alimentos de las ofrendas del Día de Muertos después del 2 de noviembre?

Pon atención a los elementos que si puedes comer después de quitar la ofrenda de Día de Muertos.
miércoles, 30 de octubre de 2024 · 21:05

Si colocaste tu ofrenda de Día de Muertos este año, seguramente también agregaste fruta y deliciosos platillos, así como el tradicional pan de muerto entre los elementos del altar, y seguramente te estés preguntando si, después de terminar estos días de celebración, te puedes comer los alimentos que has colocado. Aquí te explicaremos si es posible y qué riesgos corres en ciertos casos. Solo sigue leyendo.

¿Qué hacer con la comida después de la ofrenda de Día de Muertos?

Para muchas comunidades, la tradición dicta que la comida, después de pasar varios días en el altar de Día de Muertos, pierde su esencia, pues las ánimas se han alimentado de ella; por eso, muchas personas optan por desecharla o incluso enterrarla. No obstante, hay muchos de los elementos de una ofrenda que aún se pueden consumir y que se pueden aprovechar para evitar desperdiciar comida. Aquí te contamos qué hacer en cada caso.

Guisados y platillos

Hay muchos platillos tradicionales que se pueden colocar en la ofrenda, desde un rico mole en muchas de sus variedades hasta los clásicos tamales. Este tipo de alimentos van a comenzar su proceso de descomposición una vez que los dejes por mucho tiempo a la intemperie, por lo que, después de varios días en la ofrenda, no es recomendable consumirlos. En este caso, lo mejor es retirarlos y no consumirlos o incluso colocar figurillas en vez de comida real para evitar tirarla una vez haya acabado la celebración.

Frutas

Para las frutas, es bastante posible que se mantengan en buen estado, sobre todo si has seguido los consejos que te dejamos en esta guía para que tu fruta no se eche a perder. Si al terminar la celebración de Día de Muertos la fruta de tu ofrenda tiene buen aspecto, no se encuentra golpeada o afectada por insectos, entonces es bastante posible consumirla; incluso puedes transformarla en mermeladas o dulces tradicionales.

Dulces y calaveritas

En cuanto a los dulces y golosinas, la mayoría se puede comer si ha pasado muy poco tiempo desde que los colocaste en la ofrenda. Muchos dulces tradicionales pueden permanecer dentro de sus envoltorios y comerse al finalizar la celebración sin mayor preocupación. Lo mismo sucede con algunas preparaciones, como la calabaza en tacha o el dulce de tejocote, que son clásicos en estas fechas y que, si se colocaron de forma correcta y no se dejaron mucho tiempo a la intemperie, aún pueden ser degustados. Incluso puedes consumir las calaveritas de azúcar y chocolate, aunque en estos casos no es recomendable hacerlo por los niveles de azúcar que pueden aportar a tu organismo.

Es mejor no consumir muchos alimentos que quedan expuestos en la ofrenda. Foto: Shutterstock

Pan de muerto

En muchas ocasiones el pan de muerto queda duro, si  humedad y ha perdido su sabor después de pasar varios días en la ofrenda, en este caso lo mejor es no consumir el pan de muerto que ha estado mucho tiempo a la intemperie pues es muy probable que las bacterias, hongos y microorganismos ya lo hayan contaminado.

Bebidas

Por último, tenemos las bebidas que se colocan en la ofrenda. Si se trata de bebidas cocinadas tradicionales y bastante sensibles a la temperatura, como un atole, el chocolate, el pulque, el tequila, el mezcal o la cerveza, lo mejor es no consumirlas, sobre todo si han estado expuestas. En el caso de los destilados, algunos perderán parte de su graduación alcohólica si los has destapado, pero si colocaste una botella de alcohol, como el tequila o el mezcal, y no la abriste durante la celebración, aún puedes disfrutarla sin problema.