Consejos y tips
¿Cómo recalentar frijoles para que no se descompongan? Truco para mantenerlos por más tiempo
Evita que las bacterias y los microorganismo proliferen en tus frijoles con estos consejos para recalentarlos adecuadamente.Si tienes frijoles cocidos en casa, uno de los puntos cruciales para mantenerlos en buen estado es recalentarlos correctamente y así evitar la propagación de bacterias, sobre todo si el almacenamiento en casa no se ha llevado a cabo de la mejor manera. Esta vez te diremos cómo recalentar tus frijoles correctamente para evitar que se echen a perder y algunos detalles que debes tener en cuenta para almacenar estas legumbres.
Recalienta tus frijoles cocidos con agua limpia
Si sospechas que tus frijoles cocidos están próximos a echarse a perder y no quieres desperdiciarlos, una forma excelente de recalentarlos es eliminando el caldo de cocción, enjuagarlos y recalentarlos con agua limpia. Esto ayudará a eliminar fácilmente los microorganismos que puedan comenzar a proliferar en tus frijoles y que pueden causar que se echen a perder.
Asegúrate de que los frijoles hiervan correctamente
Al calentar los frijoles de esta manera, es muy importante que hiervan. Existen bacterias y microorganismos que pueden soportar altas temperaturas; sin embargo, se recomienda que el agua, y en este caso el caldo de los frijoles, alcance el punto de hervor para asegurarnos de que los alimentos lleguen a la temperatura adecuada y eliminen todos estos microorganismos.
Considera transformar tu plato y haz frijoles refritos
Otra forma de asegurarte de que tus frijoles cocidos se recalienten adecuadamente y queden libres de bacterias es hacer frijoles refritos. Esto significa transformar los frijoles en un producto completamente diferente que tendrás que cocinar a temperaturas altas. Para ello, puedes utilizar agua limpia, un poco de leche o incluso el mismo caldo de cocción de los frijoles al momento de machacarlos y darles una textura más fluida.
Recomendaciones: almacena tus frijoles adecuadamente
Por último, recuerda que los alimentos cocinados deben guardarse en refrigeración para mantenerlos adecuadamente. Colócalos en recipientes cuya tapa tenga un sello hermético y guárdalos dentro de tu nevera en la parte central, ya que esta es la zona donde la temperatura es más estable. Asegúrate de que tu refrigerador esté entre los 2° y los 4° Celsius.