Los jitomates son uno de los frutos que más han subido de precio en las últimas semanas. Por eso probablemente te haya surgido la idea de que puedes tenerlo en casa y si te aventuraste a cultivar jitomate, entonces ahora hay que seguir con el proceso hasta el final para que recolectes esas frutas de manera exitosa.
El jitomate es un fruto que suele crecer en clima templado. Requiere más agua y cuidados especiales para mantenerlo saludable y lejos de las plagas, que se suelen sentir atraídas por esta hortaliza. Por eso hoy queremos enlistarte algunas recomendaciones para cuidar nuestras plantas.
Algunas de las plagas más comunes que puedes encontrar en tu hortaliza de jitomates son los pulgones, minador, trips, mosca blanca, araña roja, orugas, mildiu, roya, podredumbre botrytis, la blanca y la apical, que se da por un defícit de calcio. Pero para evitar que se aparezcan por ahí, lo que puedes hacer lo siguiente.
1. Vigila tus cultivos
Los cultivos de jitomate deben de estar muy bien vigilados. Esto es importante, especialmente, porque al hacerlo, podrás detectar si una plaga ha empezado a dañar tu planta. Suelen empezar con una hoja que hay que quitar para evitar que esta se propague.
2. Riega tu hortaliza adecuadamente
El jitomate requiere un riego constante y uniforme para un crecimiento saludable. Evita el exceso de agua que pueda generar pudrición de la raíz y asegúrate de que el suelo tenga un buen drenaje. El riego por goteo puede ser una opción eficiente.

3. Establece un método de control de plagas
Establece un programa de control de plagas para prevenir infestaciones. Utiliza métodos orgánicos como la rotación de cultivos, la introducción de insectos beneficiosos, o el uso de insecticidas naturales en caso necesario. La prevención es clave para evitar problemas graves.
4. Aplica fertilizantes de manera adecuada
Proporciona a las plantas de jitomate los nutrientes esenciales mediante una fertilización equilibrada. Utiliza fertilizantes orgánicos o de liberación lenta para evitar la acumulación excesiva de sales en el suelo. Asegúrate de seguir las indicaciones del fabricante y no sobrefertilizar, ya que esto puede ser perjudicial.
5. Agrega un soporte para el crecimiento
Dado que los jitomates suelen crecer en forma de arbustos, proporciona un sistema de soporte adecuado para evitar que las ramas se rompan debido al peso de los frutos. Puedes usar estacas, jaulas o mallas para sostener las plantas y mantenerlas erguidas.