¿Cómo afilar un cuchillo fácilmente con una taza y en casa?; así puedes hacerlo con estos tips

No hay nada más molesto que estar cocinando, que llegue el momento de tener que picar alguna verdura como la cebolla o fruto como el jitomate y que el cuchillo no tenga filo para cortar. En ése momento, definitivamente quisiéramos hacer todo lo necesario para devolverle el filo, pero no podemos, pero por fortuna, hoy en día hay solución para casi todo. 

Y precisamente por eso es que hoy queremos compartir contigo un truco que te puede servir para hacer que tu cuchillo vuelva a tener filo, sin visitar el aparatito afilador, que además no todos tenemos en casa, pero que si eres lo suficientemente creativo, lo puedes hacer tú misma con objetos que seguro resguardas en tu cocina.

Sí, es verdad que puedes sacarle filo a los cuchillos con una piedra, con otro cuchillo y hasta con un afilador, pero ¿Qué pasaría sino tuviéramos nada de eso a la mano? La verdad es que tenemos que ingeniárnoslas con lo que podemos utilizar de nuestra cocina. Por esa razón es que queremos decirte cómo es que puedes sacarle filo a esta esencial herramienta culinaria con ayuda de una taza. 

¿Cómo afilar un cuchillo en casa con una taza de cerámica?

Para lograr afilar un cuchillo que no es de sierra, puedes usar una taza de cerámica. Debes de ponerla boca abajo y luego pasar la hoja del cuchillo (con lo que corta) de un extremo a otro o de arriba a abajo, como si quisieras cortar de un sólo tajo la base de la taza con esta herramienta. Hazlo en repetidas ocasiones.

Cuando veas que la base de la taza comienza a ensuciarse y que la hoja cortadora del cuchillo se ve un poco más brillante, querrá decir que está funcionando y para hacer la prueba, basta con cortar algo después de algunos minutos de estar haciendo el movimiento indicado sobre la taza para afilar. 

Afilar un cuchillo con una taza y agua

Si por alguna razón esto no funciona, puedes mojar la base de la taza o la hoja del cuchillo y aplicar el mismo procedimiento varias veces. Al paso de algunos minutos, verás cómo fue posible devolverle algo de filo a tu cuchillo plano de manera fácil, económica y sumamente eficiente.