El café que tienes en tu cocina puede tener un doble uso cuando se trata de las plantas florales como las rosas o las orquídeas y es que este elemento tiene muchos nutrientes que pueden lograr revitalizar estos cultivos y darles un aspecto increíble, lo mejor de todo es que no vas a necesitar el café fresco para esto, ya que el abono de café que te enseñaremos a preparar hoy requiere los pozos o restos de café de tu cafetera, de este modo puedes mejorar tus plantas y darle una segunda vida a este desecho.
Los pozos de café son los restos del café molido que queda dentro de la cafetera una vez que se ha infusionado con agua caliente, estos son muy fáciles de usar y además pueden aportar minerales como el potasio, el nitrógeno o el fósforo e incluso pueden ahuyentar varios tipos de plaga, lo único que tienes que tener en cuenta es que debes tratar primero el café adecuadamente para evitar el crecimiento de hongos y nosotros te enseñaremos a hacerlo aquí.
Cómo transformar el café en abono
- Toma tus pozos de café y extiéndelos sobre una charola
- Coloca la charola al sol y deja que los restos de café se sequen
- Revuelve los restos de café y deja secando de nuevo para eliminar por completo la humedad
- Una vez secos estarán listos para aplicar en tus plantas

Cómo aplicar el abono de café
Para aplicar los restos de café sobre las plantas como las orquídeas o las rosas basta con agregar una pequeña cucharadita de los pozos de café secos directamente sobre el sustrato, revuelve ligeramente y después aplica un riego por encima. Ten en cuenta que no deberás repetir el abonado demasiado pronto ya que este puede acidificar de más el suelo y aunque algunas plantas lo prefieren así, en otros cultivos puede llegar a estropear tus flores.