Hay temporadas que se sienten sumamente pesadas y en las que nos sentimos sin energía, sin ganas de hacer nada o incluso tenemos la impresión de que nada nos sale bien y cuando todo se nos junta, nunca falta quien nos diga "hazte una limpia", pero cuando tenemos el dinero limitado para cubrir nuestras necesidades, pues no hay cómo pagar algo de ayuda extra, pero sí podemos hacer algunos rituales, que podemos hacer en casa esperando que nos ayuden.
Lo creas o no, todas las personas tenemos un poco de magia, aunque no siempre lo queramos reconocer, pero a veces hay que hacer uso de ella, al menos para que con nuestras intenciones, movamos un poco de esa pesadez y mala vibra que traemos cargando y para eso hoy queremos decirte cómo hacer un ritual para ello.
El baño es física y simbólicamente el momento de depuración más claro que puede tener nuestro cuerpo. Es un momento que tenemos para estar con nosotros mismos y por esa razón es que también debemos de pensar que es un gran instante para limpiarnos energéticamente de todo lo que nos haya afectado en el día o la semana, pero si quieres añadirle un factor diferente, pues puedes usar sal de grano.
Significado esotérico de la sal
La sal tiene un significado esotérico en muchas culturas y prácticas espirituales. En la religión cristiana, por ejemplo, la sal se considera un símbolo de purificación y se utiliza en algunos rituales religiosos para bendecir o proteger lugares y personas. En algunas tradiciones paganas, la sal se utiliza como un agente de purificación y protección contra las energías negativas.
En este caso, lo que haremos será decirte cómo puedes incorporarla a tu baño, para que te descargues y limpies de todas las energías negativas, que te han molestado hasta el momento. Lo ideal sería que tuvieras una tina donde pudieras recostarte para limpiar tu cuerpo con sal de grano, que energéticamente te hará sentir mejor y físicamente, podría ayudarte a exfoliar la piel de tu cuerpo.
Si no tienes tina, podrías disolver la sal en cubetas y bañarte con ella, pues lo que importa es la intención con lo que lo hagas, pero recuerda que después de bañarte así, debes enjuagarte como cotidianamente lo harías, porque definitivamente no reemplazará nunca el jabón, que tanto amamos.
¿Qué necesitas?
- 2-3 tazas de sal de grano
- 1 tina o cubeta con agua caliente donde disolverás la sal
¿Cómo se prepara?
- Prepara un baño o ducha con agua caliente. Asegúrate de que el agua esté a una temperatura cómoda para ti.
- Agrega 2-3 tazas de sal de grano al agua caliente. Remueve la sal para que se disuelva bien.
- Entra en la bañera o ducha y cierra los ojos. Imagina que la sal está eliminando todas las energías negativas que puedas tener.
- Mientras te bañas o duchas, frota suavemente la sal sobre tu piel. Comienza por los pies y sube lentamente hasta la cabeza. Concéntrate en las áreas donde sientas tensión o dolor.
- Permanece en el agua durante unos 15-20 minutos. Mientras estás en la bañera o ducha, intenta relajarte y meditar.
- Siéntete libre de repetir afirmaciones positivas o visualizaciones que te ayuden a eliminar las energías negativas.
- Una vez que hayas terminado, sal de la bañera o ducha y enjuágate con agua fría para cerrar los poros.
- Sécate con una toalla limpia y fresca.
