Te decimos paso a paso cómo debes lavar tu licuadora para dejarla completamente limpia

Una de las actividades que suele causar más preocupación a la hora de la limpieza en la cocina es el lavado de la licuadora y es que al hacerlo nos exponemos a las navajas y a un posible corte, pero es necesario limpiar este elemento a profundidad para que nuestras preparaciones salgan siempre de la mejor manera, por eso esta vez nosotros te enseñaremos a limpiar correctamente tu licuadora y que quede sin rastro de alimentos. 

Con aspas removibles

Para limpiar la licuadora adecuadamente lo primero que debemos identificar es si podemos retirar las aspas del vaso o no, ya que existen muchos modelos que las traen integradas y otros más que permiten la separación de esta pieza. Si las aspas pueden retirarse del vaso, una vez que las haya separado déjalas remojando en agua caliente con un poco de vinagre antes de tallarlas con un cepillo de dientes que ya no uses y jabón para trastes, esto te permitirá manipularlas de forma más segura. 

Una vez que hayas tallado tus aspas, lava el resto de la licuadora con jabón para trastes como comúnmente lo haces, poniendo especial atención a la rosca y el sello de goma que suelen traer en la parte de las aspas. No olvides secar todo muy bien ya que de esta manera evitarás que la humedad genere bacterias y microorganismos que puedan terminar contaminando tu comida. También deberás pasar un paño húmedo por el motor desconectado para dejarlo limpio. 

Con aspas integradas

Si las aspas de tu licuadora están integradas en el vaso y no se pueden quitar, deberás preparar una solución de vinagre y agua a partes iguales con un par de cucharadas de jabón para trastes, vierte este preparado dentro de tu licuadora y haz correr un ciclo de licuado por algunos segundos, es decir, déjala funcionar por un periodo corto de tiempo para que la misma fuerza del licuado nos ayude a remover todos los restos de alimentos. 

Después de que hayas procesado el agua jabonosa que preparaste, deja reposar tu vaso con el líquido dentro por 10 minutos antes de tallar con mucho cuidado el interior del mismo, lo mejor es utilizar cepillos largos para esta tarea, así no tendrás que arriesgarte con las navajas. Enjuaga por completo y no olvides pasar un paño ligeramente húmedo por el motor para eliminar cualquier resto de alimento que haya quedado sobre él.