Tener huertos y cultivar en casa tiene muchos beneficios. Primero, a la salud, pues consumes alimentos más frescos, orgánicos y naturales, ya que no contienen pesticidas. También se dice que al llevar a cabo este tipo de actividades, mejora tu salud mental ya que es terapéutico para nuestro organismo. Segundo, a tu economía, porque al cosechar en tu hogar, no gastas en comprar frutas y verduras en otro lugar. Tercero, al ambiente, ya que se reduce la huella de carbono generada en la transportación de estos alimentos.
Aquí te comparto diferentes puntos a considerar para que puedas cultivar pimiento morrón desde tu hogar.
¿Cómo cultivar el pimiento morrón en casa?
Elección: Lo primero que tienes que hacer, es elegir el tipo de pimiento morrón que quieres cultivar, ya que existe una extensa variedad.
Compra: Las semillas de pimiento las puedes encontrar en cualquier tienda de casa o jardinería, son fáciles de encontrar.
Suelo: La tierra en la que se va a cultivar tiene que estar preparada para su llegada. Debe contener muchos nutrientes, lo que se puede conseguir por medio de abono orgánico o compostas antes de la siembra.
Siembra y trasplante: Se dice que la mejor temporada para sembrar es a finales de invierno o antes del verano. Al momento de llevarlo a cabo, primero hay que hacerlo en una maceta pequeña y mantenerla en un lugar cálido y con luz. Cuando empiezan a salir las primeras hojas, hay que trasplantar a macetas más grandes, llenas de tierra y con mucho lugar para que la planta pueda crecer. Considera que las macetas deben de tener un buen drenaje y sembrar una planta por maceta.
Cosecha: Los pimientos morrones pueden estar listos para cosechar dentro de 60 a los 100 días después de ser trasplantados. Para recolectar tus pimientos, es necesario utilizar un cuchillo y cortar firmemente para evitar dañar el tallo.
Cuidados: Regar la planta regularmente, mantener siempre la tierra húmeda, localizarla en un lugar con mucha luz solar y de vez en cuando aplicar fertilizantes. Es importante no tener muchas plantas alrededor, para que no les quiten los nutrientes y puedan crecer muy sanas. También es importante ir retirando las flores marchitas.