Limpieza con ingredientes de cocina
2 formas de usar el bicarbonato de sodio para quitar el mal olor del calzado
Olvídate del mal olor del calzado con este popular ingrediente de cocina; el bicarbonato de sodioEl bicarbonato de sodio es un poderoso ingrediente de cocina que puede ayudarte a eliminar el mal olor del calzado, en especial de tenis o zapatos cerrados que por el uso continuo guarden mal aroma. Y es que las propiedades que tiene, ayudan a absorber ese aroma desagradable que se genera en estas prendas de vestir.
Este ingrediente cuenta con propiedades antibacterianas que pueden actuar como un tipo de desodorante natural que combaten directamente el mal olor que causa el moho, los hongos o en el caso de la cocina hasta los restos de comida en descomposición que pueden ocasionar olores desagradables como el bote de la basura o el fregadero en donde se lavan los trastes.
Sin embargo, en esta ocasión se puede conocer otro uso que sobresale de la cocina. A continuación, te enseñamos dos formas diferentes y muy fáciles de usar el poder del bicarbonato de sodio para poder quitar el mal olor del calzado y que puedas ayudar un poco a tus tenis o zapatos cerrados que seguramente te da pena utilizar porque tienen ese olor desagradable.
1.- Desodorante casero
Mezcla ¼ de taza de bicarbonato de sodio, ¼ de taza de polvo de hornear y ½ taza de maicena. Espolvorea este desodorante en el calzado y deja actuar durante toda la noche. Retira el polvo y utiliza tu calzado con normalidad, entre más tiempo lo dejes reposar más efecto tendrá.
2.- Aplica directamente
Si no quieres complicarte la vida realizando ningún tipo de mezcla, solo basta con espolvorear una cucharada grande de bicarbonato dentro dentro de cada par de zapatos y aplicar unas gotas de esencia de menta o lavanda, de igual forma deja reposar al menos durante 24 horas para que este par de ingredientes se encarguen de neutralizar esos olores desagradables
Cabe mencionar que el bicarbonato de sodio no solo te ayudará a quitar el mal olor sino también a eliminar las posibles bacterias que se encuentren dentro del calzado, siendo una forma natural, fácil y económica a la que se puede recurrir. Ahora ha llegado el momento de poner a prueba este par de trucos caseros.