Cuando el invierno se acerca nos da pequeñas señales que anuncian su llegada. Una forma sutil de abrir paso a una hermosa temporada es a través de los ciclos de la naturaleza. Después de las celebraciones de Día de Muertos unas semanas más tarde las calles e incluso las casas comienzan a tener un decorado especial en el que resalta la belleza de una hermosa flor roja, la euphorbia pulcherrima, mejor conocida como flor de pascua o flor de nochebuena.
Esta flor con destacadas hojas rojas toma relevancia y es popular durante el último mes del año. Su nombre en latín es willd ex klotzsch y quiere decir: la más bonita o la más bella. La flor de nochebuena tiene sus orígenes en Centroamérica y México, los estados con mayor producción en el país son Morelos, Guerrero, Michoacán y Ciudad de México.
Se cree que esta flor era utilizada en la época prehispánica para adornar altares de la diosa Tonantzin o era utilizada como trofeos para los guerreros después de las batallas, según la información en el portal del Gobierno de México. Además de ser usadas para adornar, las hojas de la flor de nochebuena son usadas como tinte natural.
Durante la temporada decembrina miles de familias adoptan esta flor para el decorado en los hogares y oficinas, por lo que es importante mantener los cuidados básicos para que su floración se mantenga óptima y pueda durar frondosa por mas tiempo. Si quieres conocer cuáles son esos tips continúa leyendo.
Cuidados básicos para la flor de nochebuena
Riego. La flor de nochebuena debe tener un riego moderado, durante esta época se recomienda sea suministrada cada tercer día. Es importante mantener la tierra húmeda evitando encharcar la maceta.
Iluminación. La flor de nochebuena debe recibir suficiente iluminación, pero no de forma directa, por lo que únicamente se recomienda tenerla cerca de una ventana, evitando que los rayos del sol no penetren sus hojas.
Tierra. Es importante revisar que la maceta donde tengas la flor de nochebuena contenga tierra de buena calidad, si notas que le hace falta, coloca un poco más de tierra para que la flor no se marchite.
Trasplante. Cuando notes que el ciclo de la flor de nochebuena está culminando, es momento de trasplantar y así darle una segunda oportunidad a la flor. Corta dos terceras partes de sus tallos y retira las partes muertas. Y sigue los cuidados generales como si la tuvieras recién comprada.
