La salsas son ingredientes esenciales para muchas de nuestras comidas y no es para menos. Estas suelen darle un toque fantástico a la gran mayoría de nuestros platillos y disfrutamos enormemente el poder agregarlas. Algunas, quizá mucho más picosas que otras, pero sin duda una de nuestras grandes favoritas: la salsa verde.
Como todo buen mexicano, siempre va a existir está parte de la pelea entre la salsa verde y la roja, siendo la primera opción unas de las más amadas. Y de esta misma manera, tenemos que hacer énfasis en que nos siempre nos queda de un sabor extraordinario y muchas veces puede ser un poco más ácido de lo que imaginamos.
Justamente por ello, el día de hoy queremos dejarte algunos tips para que la próxima vez que realices tu salsa, puedas tener un resultado extraordinario y te quede más que perfecta.
Tips para que tu salsa verde no quede ácida
1. Bicarbonato
Unas de las recomendaciones que podemos darte para evitar que tu salsa quede ácida es agregar un poco de bicarbonato de sodio. Esto deberás hacerlo al momento de poner a hervir tus tomates y agregarás una cucharadita de bicarbonato de sodio. Esto tendrá como efecto que quede balanceado el pH del tomate y elimine el sabor agrio.
2. Azúcar
Si al momento de probarlo te das cuenta que tu salsa está agría, entonces para esto puedes usar azúcar. En este caso lo que te recomendamos es agregar una cucharadita de azúcar, tampoco quieras agregar mucho, porque podrías tener un efecto que no te gustará. Esto ayudará a equilibrar y eliminar el sabor ácido.
3. Tatemar
Algunos tipos de salsas suelen ser “crudas” y con ellas puede no sentirse mucho la parte del ácido. Esto se debe a que pasa por un proceso de tatemado, el cual podría ser el efecto que te dará como resultado que quede perfecto.
