Las plagas al parecer no descansan. A pesar del cambio de clima, todavía en otoño podemos observar algunas sobre todo en nuestros árboles frutales, que están a la intempérie. Algunos que están en temporada dando frutos, como la guayaba, limón, mandarina, naranja y hasta tejocote, pueden llegar a ser infestadas por estas.
Una de las plagas más populares entre los árboles frutales sin duda es la polilla de la fruta, mejor conocida como palomilla. Sin embargo, contrario a lo que pudieras creer como que sólo aparecen en las frutas que ya están maduras y abajo del árbol, también pueden invadir a tu árbol, causando algunos daños a tus ejemplares.
Muchas veces no sabemos por qué algunos frutos tienen signos que otros no y casi siempre se trata de la invasión de alguna plaga, como en este caso es la de las polillas de la fruta, un padecimiento ligeramente silencioso, pero que si sabes detectar, podrás salvar a tus árboles y frutos de ellas. Por eso eso precisamente es que hoy decidimos compartirte algunos de los síntomas que aparecen en las frutas infectadas.
1. Agujeros en la fruta
Las polillas de la fruta acostumbran poner sus huevos dentro de los frutos, lo que a la larga puede provocar agujeros en la superficie de la fruta. Por esa razón cuando veas frutos con agujeros tanto en el árbol, como a sus pies, podría tratarse de ejemplares infectados.
2. Larvas
Las larvas de las polillas se alimentan de la pulpa de la fruta desde el interior, lo cual puede provocar daños y descomposición de la fruta, que normalmente tiende a colorear alguna zona con matices más oscuros, que el resto de la fruta. Así que si ves que tu fruta está oscura y blandengue, probablemente guarda o guardará larvas, advierte el Integrated Pest Management (IPM).

3. Excrementos en la superficie de la fruta
Cuando observas residuos de excrementos en la superficie de la fruta, es un indicativo claro de la presencia de larvas de polillas.
4. Frutas dañadas o en mal estado
Si notas que tus frutas presentan decoloración, pudrición u otros signos de deterioro anormal, es posible que estén infestadas por polillas.
5. Hilos de seda
Esta es una de las señales más claras, pues algunas polillas pueden tejer hilos de seda alrededor de los frutos para proteger los huevecillos o larvas, por lo tanto, su presencia, puede ser un indicio de infestación.