¿Cómo cultivar el anís en una maceta de tu huerto casero?; aquí te decimos paso a paso

El anís es una de las bebidas alcohólicas más requeridas sobre todo en los tiempos de frío, como los que estamos viviendo. Sin embargo, más allá del alcohol, es una semilla y especia que se puede utilizar en un sin número de postres, bebidas y platillos navideños. Por eso es que si tienes oportunidad de cultivarlo en maceta, pues deberías aprovecharla.

Por eso es que justo aquí queremos compartir contigo nada más y nada menos que una pequeña guía para que puedas cultivar tu propia planta de anís en maceta y en tu propio hogar o huerto urbano. Debes de ser paciente, porque el fruto al final o mejor dicho, las semillas puedes usarlas como especias para tus comidas. 

El anís es una planta conocida por sus pequeñas semillas con sabor a regaliz, que se utilizan comúnmente, como especia en la cocina y en la fabricación de bebidas alcohólicas como el licor de anís. Normalmente se da en climas cálidos y soleados en suelos bien drenados y fértiles. 

Hay muchos tipos de anís como el verde, que se conoce como el dulce; el anís estrellado, que se usa para infusiones o postres; el japonés, que puede ser tóxico y que no se consume y el de Florencia, que se utiliza para cocinar platos salados y que también se le conoce como hinojo, pero aquí te decimos cómo cultivarlo. 

1. Plantarlo directo al suelo

Debes saber que se planta directo al suelo donde quieres que tu planta crezca, en este caso en la maceta. Además es importante que el sustrato o la tierra sea rico en minerales y materia orgánica. Además debe tener un buen drenaje y con un pH de entre 6,0-6 o 7.  Debe contar con al menos 8 cm de profundidad. 

2. Utiliza cualquier abono

La planta de anís puede ser desde el compost hasta el estiércol. Todos lo beneficia. Si tienes pensado cosechar, es necesario usar un abono mineral a base de potasio, porque el nitrógeno en exceso puede perjudicarle. 

3. Cuida el riego del anís

Riega con poca agua y de forma regular entre 2 y 3 veces por semana, especialmente durante los periodos de sequía, como el invierno, pero eso sí: sin encharcar. 

4. Siembra a finales del invierno

Lo que debes hacer es tapar las semillas con tierra, pues necesitan oscuridad para poder germinar en 2 o 3 semanas. La planta alcanza la madurez hasta 120 días después. 

5. Cosecha

El anís suele cosecharse entre los meses de agosto y septiembre, cuando las semillas empiezan a volverse marrones, pero aún son un poco verdes. Para cosechar hay que cortar el paraguas de flores de la planta por la mañana, atar los manojos y ponerlos en un lugar fresco y ventilado, luego, deberás moverlos a una zona cálida, frotar el paraguas de flores para separar las semillas.