7 diferencias entre el tequila, mezcal y aguardiente

Las bebidas mexicanas tienen fama y aceptación a nivel mundial. Tanto así, que muchos famosos ya cuentan hasta con su propia marca de tequila y mezcal, que comparten con sus amigos, familia, ya sea en reuniones especiales o el día a día. Eso no importa, pero la verdad es que cuando eres poco conocedora, pues es posible que todas tus bebidas se vean y hasta te sepan igual, pero la realidad es que todas son super diferentes.

El tequila, mezcal y aguardiente son bebidas destiladas, que si les das un sorbo por separado y no las has probado nunca, podrían parecerte lo mismo, pero la realidad es que cada una tiene características muy particulares, que debes de aprender a notar para que no te vendan gato por liebre. Por eso mismo  queremos compartir contigo 7 diferencias claras que existen entre estos destilados, así que ¡toma nota!

1. El grado de alcohol etílico

Esto no se sabe, hasta que probamos las bebidas, pero es un hecho, que mientras la graduación mínima de un aguardiente es de 30°C, el tequila suele mantener una que queda entre los 36 y 40 grados, mientras que el mezcal tranquilamente puede y llega a rebasar los 40 grados de alcohol. Definitivamente, este último se te puede subir más rápido que cualquiera de los otros, le duela a quien le duela.

2. El sabor

Debido a que todas estas bebidas se realizan con distintos tipos de agave, sus sabores cambian. El mezcal, que se puede elaborar con diferentes tipos de agave, su sabor puede variar y en el caso del tequila, al paladar puede llevar algunas notas más florales y hasta ligeramente dulces. El aguardiente, por su parte, puede tener una amplia variedad de sabores (porque viene de la caña de azúcar) y es extraordinaria para usar en bebidas mixtas. Se pueden encontrar algunas notas de manzana, caramelo, canela, durazno y hasta menta. 

3. Los magueyes de donde se obtienen

Sí, todas estas bebidas algo tienen que ver con el maguey o agave, pero debes saber que el tipo de esta planta, cambia, pues mientras para el tequila se usa el agave azul, también conocido como tequilana weber, para el mezcal existe una variedad más grande, entre los que destacan el agave gusano, pechuga, blanco, minero, cedrón, de alacrán, crema de café y otros. Y para hacer el aguardiente, se puede usar el mismo que el tequila, el agave americana L o más comúnmente los melados de la caña de azúcar. 

4. El proceso de destilación 

La destilación une a todas estas bebidas, pero también las distingue, pues mientras para destilar tequila se usan hornos de vapor, para el caso del mezcal, se logra gracias a lo alambiques de cobre, mientras que para hacer aguardiente es necesario dejar fermentar los jugos y melados de la caña de azúcar, para que después se pueda destilar  y nos dé como resultado esta bebida.

5. Las regiones donde se producen

Duele admitirlo o aceptarlo, pero es un hecho que estas bebidas se pueden localizar, de acuerdo a las zonas de donde son originarias. El mezcal es una bebida típica del estado de Oaxaca, mientras que el tequila corresponde tradicionalmente a Jalisco, aunque según su denominación de origen, también puede ser de Michoacán, Tamaulipas y Jalisco. Por su parte, el aguardiente es un poco más local, que se llega a encontrar en Chiapas, Guerrero, Morelos y Oaxaca, aunque en Veracruz se llega a producir macerando diversos frutos, raíces y plantas, que se denominan compuestos. 

6. La elaboración artesanal o industrializada

A pesar de que las 3 bebidas pueden realizarse de forma artesanal, hoy en día no es tan sencillo encontrar tequila artesanal, porque el proceso ya es mucho más industrializado, que el del aguardiente o incluso del mezcal. Sin embargo, esto no quiere decir que estas dos bebidas no se puedan industrializar, pues de hecho hay conocidas marcas que encuentras en el mercado con estas bebidas.

7. El embotellado 

Este es todo un tema, porque a pesar de que las botellas para envasar tequila, mezcal y aguardiente tienden a ser similares, la verdad es que distinguirlas no es tan complicado, porque para empezar, los envases de mezcal suelen ser un poco más alargadas, las de tequila un poco más anchas y las de aguardiente, de plano suelen ser de plástico, enanas y fáciles de transportar, pero lo mejor para saber qué es lo que compras, es leer la etiqueta.