La sandía es una de las frutas más grandes e importantes que tenemos, a pesar de ser originaria de África, con el paso del tiempo se ha consolidado como una de las mejores opciones en todo el globo terráqueo. México se ha consolidado como el país número 11 ne producción de sandía a nivel mundial, teniendo a Sonora como el principal productor, al ser aquel que aporta entre 35% y 40% del volumen nacional, seguido de Jalisco que cuenta con un aporte del 10% de la producción.
En sí, podemos decir que la fruta ya es realmente especial, sin embargo algo que no tomamos mucho en cuenta es precisamente su cáscara. Automáticamente lo primero que pensamos cuando se la quitamos a la sandía, es que, esta ya no tiene ningún uso y por ello deber terminar en la basura, sin embargo esto no es del todo real. Resulta que la cáscara puede tener un segundo uso y te contamos todo lo que puede hacer.
Cáscaras Fritas
Como lo hemos comentado en una gran cantidad de frutas, se pueden llegar a ser las famosas cáscaras fritas, mismas que podrán ser una gran opción para diversos snacks de manera saludable. En este caso debemos quitar el verde del exterior de la piel, cortar lo que resta como si fueran unas papas, salpimentamos, enharinamos y llevamos a freír
Mermelada
De la misma manera en que la pulpa nos puede ayudar para crear una mermelada, la cáscara de sandía puede ser una opción fantástica para crear una mermelada. Para ello deberás quitar la parte verde del exterior y dejar lo blanco, necesitarás combinar con agua, azúcar, vinagre de manzana y limón, para tener una mermelada fantástica. Puedes incluir un poco de la pulpa para darle un sabor extra.
Batidos
Algo que probablemente poca gente sabe cómo es que al momento de hacer un batido de frutas, podemos añadirle la parte blanquiverde de la sandía. De esta manera le estaremos dando un plus en cuanto a la fibra de nuestro batido en la salud.
Ralladura
Aunque sean un poco loco, principalmente porque la cáscara de la sandía suele ser un poco gruesa áspera, en realidad puede ser una gran opción como ralladura en una ensalada a modo de condimento. Incluso podrías utilizar tu rallador de queso es para ayudarte a sacar el polvito y usarlo sobre cualquier sopa fría.