¿Cómo comer el jamón serrano? Aquí te decimos un tip que te encantará

Cuando se trata de gastronomía mexicana, podemos parecer periquitos porque hablamos y hablamos, ya nos la sabemos de todas, todas, que se come con qué, las botanas, platos fuertes, postres o ¡todo junto! por qué no. Eso es lo más esperado si una es mexicana, pero cuando se trata de entrarle a la comida internacional, entonces nos metemos en problemas, porque no sabemos nada y esto tiene que ver, en la mayoría de los casos con el desconocimiento de la cultura, los alimentos y un largo etcétera. 

Por esta razón, cuando queremos improvisar tratando de ocultar nuestros errores, pues quedamos más mal que bien, sobre todo por no admitir que no es realmente nuestra área. Y es que cuando alguien te dice "hagamos una tablita de carnes frías" suena sencillo, pero lo más seguro es que no pensemos en algo más que el jamón que le ponemos a nuestro sándwich y ya si nos queremos ver muy nice, en el peperoni (el de las pizzas)

Sin embargo, aunque las carnes frías no son precisamente las más usadas en el día a día, sí que pueden ayudarte a tener ese toque fancy en una reunioncita con tus compis, pero eso sí, ¡tienes qué saber cómo presentarlas y con qué puedes combinarlas! En carnes frías cabe todo: Desde el jamón y la salchicha, hasta el salami y el jamón serrano, que claro que es delicioso, pero no le va a todo, debido a su nivel de sal. 

¿Qué es el jamón serrano?

 Por eso, hoy decidimos revelarte el truco de trucos para comer este delicioso alimento, que es sumamente común en España, su cuna y tierra que lo vio nacer. Lo primero que hay que entender, es que se obtiene a partir de la salazón y secado al aire de las patas traseras del cerdo. Se contrapone al jamón cocido, también llamado jamón de York o "jamón dulce". Se llama serrano por la costumbre de curar el jamón en parajes altos de las sierras, donde las bajas temperaturas facilitan la curación.

El cerdo puede ser de raza blanca o bien de la raza llamada ibérica. El jamón de este último es llamado jamón ibérico, y jamón de bellota cuando este último ha ingerido cierta cantidad de bellota durante el período de montanera (engorde).  El cerdo blanco no se alimenta con bellota. El jamón y las paletas de cerdo Duroc son un tipo de jamón más infiltrado y con más grasa dorsal que el jamón de cerdo blanco.

¿Con qué puedes comer el jamón serrano?

Y ahora que sabes esto, es prudente que sepas que en el supermercado lo puedes encontrar en tiras delgadas que no te dicen mucho qué puedes hacer con él, pero lo cierto es que para la tabla de carnes frías, lo que le va muy bien es que lo cortes en tiras más pequeñas, que puedes enrrollar y luego juntar con cubitos de melón. Esta combinación seguro que te volará la cabeza cuando la pruebes, ya verás.