Usos que le puedes dar al tomate cuando está maduro, checa estas opciones

Lycopersicum esculentum L. mejor conocido como jitomate, es uno de las verduras más importantes y destacadas que tenemos en la vida, además del chile, la papa y el tabaco. Aunque mucho se le asimila el jitomate, originario de Perú, en realidad fue en México donde se domesticó y bautizó este fruto. Su nombre proviene del náhuatl xictitomatl o "tomate de ombligo" y, desde su nacimiento se ha consolidado en muchas partes del mundo como un esencial en la cocina. 

En China es el principal productor del jitomate en el mundo, seguido de India y, en total, se puede producir en un 40% del volumen total. Nuestro país se coloca en el décimo lugar, aportando un 3.1% de la producción mundial, situándose en Sinaloa el estado donde mayor producto se obtiene, seguido por San Luis Potosí y Michoacan. Y, aunque, el jitomate se asimila como opción para usar después de un tiempo de compra, no tiene porque tirarse cuando lo vemos un poco más "maduro". Checa estas opciones para darle más tiempo de vida a tus tomates maduros. 

Tomates secos 

Probablemente una de las opciones más sencillas de conservar tus tomates secados. Una vez que los tengas, te recomendamos extenderlos en unas rejillas o mosquiteras, en rebanadas. Para lograrlo, te sugerimos extender las en la rejilla en un día caluroso y soleado, es importante que estén cubiertas si tu casa cuenta con mucha presencia de insectos, para evitar atraerlos, en especial a las hormigas o moscas. Deja secar por varios días y listo, después de un tiempo podrás usarlo en la manera en que quieras. Te sugerimos bañarlos en aceite de oliva y condimentarlos con sal pimienta, albahaca y orégano.

Tomate deshidratado 

Aunque esta técnica es muy similar al secado del sol, para esta opción vas a necesitar de uno de los utensilios más odiados por todos; el horno. Para conseguirlo, deberás llevarlos al horno a 50ºC por unas 10 horas, por supuesto, puedes hacerlo por periodos para que no tengas problema de luz, por eso mismo te recomendamos hacerlo a la luz del sol. 

Tomates en conserva 

Los tomates en conserva se mantienen mucho mejor su sabor y dulzor. Con un cuchillo deberás meterlos a un refractario de vidrio sin piel, ni tallos. A continuación te recomendamos utilizar una espumadera para escalar cada fruto cortado sumergiéndolo en agua hirviendo rápidamente durante unos 30 segundos. Retiras la piel y lo colocas en el tarro con sal y baño de agua hiriendo de 30-40 minutos. 

Salsa para pasta 

Como siempre lo hemos dicho, lo hecho en casa es mucho mejor ahora esto avala la situación. Para preparar este deliciosa salsa de tomate, lo único que tienes que hacer, es llevar a tu trituradora favorita los jitomates maduros. Aunado a ello, puedes añadir cebollas, pimientos, champiñones o lo que más te guste. Eso sí, la única recomendación que te damos es que no utilices lácteos para prepararla y que añadas un poco de jugo de limón o algún jugo de cítricos para aumentar la acidez y prolongar su vida.