Huerto urbano

Truco para cultivar lechuga en botella de plástico y tenerla disponible todo el año

Lo mejor que le puede pasar son los suelos ligeros, abonados y con buen drenaje, por lo que es apta para las botellas
martes, 24 de mayo de 2022 · 09:30

Decidir tener un huerto urbano no es cosa sencilla. Especialmente cuando no tenemos mucho espacio y lo que queremos es aprovechar cada rincón al máximo, por lo que cada decisión debe de pensarse más, sobre todo cuando no podemos donar un cuarto o toda la sala para tener nuestras plantitas, porque ahora con el home office, que algunas empresas dejaron de tiempo indefinido, pues hay que pensar que en casa se descansa y trabaja al mismo tiempo.

Afortunadamente la vida se abre paso en prácticamente cualquier lugar y definitivamente también se pueden usar pequeños rincones de la cocina para sembrar vida y además que nos pueda servir para un montón de recetas. Ése es el caso de la lechuga, un vegetal que podría crecer sin ningún problema en un espacio reducido, porque es una de las plantitas que no necesitan macetas grandes o hectáreas para sobrevivir.

Plantas como la lechuga podemos tenerlas en pequeños viveros en la cocina, sin que tengamos que sacrificar el espacio de ningún mueble. De hecho, sólo requerimos algunas botellas ¡y listo! Es la ventaja de la agricultura contemporánea: Descubrir y adaptar nuevas formas para tener nuestras plantitas de cocina. Por fortuna se ha logrado y nosotras no podríamos estar más contentas, porque esto es realmente útil y refrescante.

¿Qué nutrientes contiene la lechuga?

La lechuga es una planta que generalmente surge de manera natural en las regiones semitempladas, que se cultiva como alimento. Tiene muchas variedades y es una de las especies más cultivadas en invernaderos, porque puede consumirse y darse durante todo el año. Entre sus variedades más populares, están la beluga, la romana u orejona, la francesa o trocadero y la batavia. En general contiene antioxidantes: vitaminas A, C, E, B1, B2, B3, B9 y K; minerales: fósforo, hierro, calcio, potasio; fibra, folatos y aminoácidos.

La lechuga soporta peor las temperaturas elevadas que las bajas. Como temperatura máxima tendría los 30 °C y como mínima puede soportar hasta –6 °C, pero cuando soporta temperaturas bajas durante algún tiempo, sus hojas toman una coloración rojiza que se puede confundir con alguna carencia. La humedad relativa conveniente es del 60 al 80 %, aunque en determinados momentos agradece menos del 60 %. El principal problema que presenta en invernadero es el exceso de humedad ambiental.

Lo mejor que le puede pasar son los suelos ligeros, abonados y con buen drenaje, por lo que es apta para las botellas, aunque debes saber que es una planta que ama luz solar, pero también se adapta a la sombra o resolana. Para regarla, lo mejor es que uses el sistema de goteo, la aspersión o el riego por gravedad.  Cabe en una botella de plástico, que ahora te diremos cómo hacer para que la puedas usar de "maceta", así que ¡manos a la obra!

¿Qué necesitas?

¿Cómo se hace?

  1. Corta por la mitad la botella de plástico y en la parte de la boquilla, coloca la tierra. Agujera la tapa para que pueda obtener agua después. 
  2. Coloca el hilo desde la parte más ancha del corte, hasta la boquilla. Llena con tierra abonada. 
  3. Agrega las semillas a unos 2 cm de la tierra y cúbrelas con la misma. 
  4. Comenzarás a ver crecimiento a las 2 semanas y en 2 meses podrás comer tu lechuga.