Huerto urbano: Así puedes cultivar garbanzos en la maceta de tu casa

Decidir tener nuestro propio huerto es sin duda alguna una de las decisiones más difíciles que podemos tomar, porque implica designar un espacio que antes podía tener otra función, pero que ahora albergará vida y a diferencia de un hijo este ser no te exigirá comida, sino que te la podrá dar y si lo piensas, eso es algo mucho más rentable, porque en lugar de ponerle otra termita al ecosistema y el medio ambiente, le regalarás un espacio verde con aire más limpio. 

Muchos dicen que cuando las mujeres estamos solteras y cerca o bien instaladas en los 30 años debemos de ver ésa habitación vacía del departamento que habitamos (en caso de que lo podamos pagar) con añoranza esperando a que un día se ocupe con una criatura. Eso puede ser cierto, pero nos conviene que no se especifique bien que clase de ser quiere la gente ahí en el lugar que TÚ habitas, porque así puedes burlarte de ellos viendo la puerta a lontananza, mientras piensas en las plantas que puedes poner ahí. 

Las plantas pueden llegar a ser los roomies perfectos, no hacen ruidos raros, no te quitan tu comida y lo más importante: tampoco el aire con el que respiras. Lo cierto es que atrás quedó el tiempo en el que las mujeres necesitaban hombres o niños para sentir que su vida estaba completa. Ahora que todos estamos con el cambio climático amenazando al mundo o con la guerra en Ucrania y Rusia haciendo lo mismo, lo mejor es distraernos un poco con actividades que no impliquen ver las pantallas de computadora y celular. 

¿Cómo es la planta de garbanzo y qué cuidados necesita?

Una de las actividades "gadget-free" sin duda alguna es la jardinería que de alguna forma se ha sabido adaptar al complicado estilo de vida que llevamos, incluso en espacios pequeños y como ya llegó la primavera, es momento de pensar en qué es lo que puedes sumar a tu huertito. La verdad es que nos complace decirte que una buena opción son los garbanzos, pues aunque es una planta que puede alcanzar hasta los 50 cm, se puede adaptar bien a las macetas.

El garbanzo es una especie de leguminosa adaptada a todos los continentes. Se suele sembrar en primavera y es una planta que tiene una temporada de crecimiento bastante larga, pues necesitan desarrollarse al menos 100 días antes de poder cosecharlos. La buena noticia es que son de fácil cuidados, siempre que logres proteger las raíces de la intemperie y evites regarlas mucho. Suena a algo que podrías hacer, ¿verdad?

Lo que sí es verdad es que los garbanzos necesitan mucho sol. Por lo tanto, deberás elegir el lugar más soleado de tu casa para que puedan crecer saludables y en el tiempo establecido. Es una planta ideal para balcón donde llega el sol buena parte del día y si no tienes, puedes asegurarte de llevar tus macetas a donde les pueda dar sol. Una vez que sabes esto, lo mejor es que te pongas manos a la obra para que pronto estés consumiendo garbanzos. 

¿Qué necesitas?

• Una maceta de unos 20 o 30 cms con agujeros en la base para drenar el agua
• Tierra arcillosa o bien tratada
• Un espacio soleado

¿Cómo se siembran los garbanzos?

1.  Siembra los garbanzos unas cuatro semanas antes de la última helada de año.
2.  Cubre tu huerta con un poco de mantillo durante la noche para aislar las semillas del frío.
3.  Llena las macetas con algo de tierra y luego coloca una semilla en cada una, entre 2,5 a 5 centímetros de profundidad.
4. Aunque es recomendable que siembres una semilla por maceta, puedes sembrar hasta dos. Cuando las semillas germinen, necesitarás retirar una de las plantas. 
5. Coloca las macetas cerca de una ventana que tenga bastante sol y asegúrate de mantener húmeda la tierra más superficial hasta que germinen los garbanzos.
6. Aunque la lluvia ocasional es suficiente, si el tiempo ha estado bastante seco, es mejor que los riegues dos veces por semana mientras crecen sus flores y sus vainas.
7. Puedes agregar un poco de compost u otro fertilizante orgánico para abonar los garbanzos durante la mitad de la temporada.