Si te gusta la comida mexicana entonces sabes que el picante es esencial en casi todas sus recetas, no obstante, el uso de este elemento debe de tomarse con cuidado, ya que muchas veces los chiles o salsas que utilizamos para ello suelen picar más de lo normal, haciendo que nuestra comida salga bastante picosa. Si esto te ha pasado, no te preocupes, pues te mostraremos algunas formas de arreglar tu platillo para que quede sabroso y sin un excesivo sabor a picante.
Dobla la receta
Una de las formas más fáciles para quitar el picante a una comida es doblar la receta, un ejemplo de ello es que, si al preparar salsa ha quedado demasiado picante, puedes integrar el doble del resto de ingredientes en ella, evitando volver a usar la cantidad de picante, así vas a balancear el resto de sabores y tu salsa quedará con un sabor delicioso.
Agrega papa
Uno de los trucos infalibles para eliminar tanto el picante como el exceso de sal en un guisado, es usar papa, muchos guisos de la cocina mexicana tiene la posibilidad de llevar vegetales integrados, así que al añadir una papá podrás minimizar elementos como lo salado o lo picante, ya que este tubérculo es excelente absorbiendo sabores. Puedes agregarlas semicocidas para que terminen de cocerse en tu guisado y así absorber mejor los excesos.
Integra más caldo
Si tú preparación lleva entre sus ingredientes caldo o agua, una forma de aligerar tanto su textura, como su sabor picante, es integrar una cantidad extra de estos ingredientes, solamente debes de considerar que al hacerlo puedes rebajar el sabor de otros elementos como especias, condimentos, hierbas y vegetales, así que debes de tomar este truco con cuidado para que tu preparación no terminé sin sabor o con una textura demasiado líquida.
Añade leche
Por último, si tu preparación se trata de una crema o una salsa cuyo contenido integra lácteos como la leche, la crema o incluso el yogurt, y ha quedado demasiado picante, puedes eliminar en buen medida el sabor intenso de este elemento agregando más leche, lo que ayudará a estabilizar y suavizar los sabores de tu plato eliminando la sensación picante.
