¡Dales una segunda oportunidad! Así puedes limpiar tus utensilios oxidados de manera sencilla

Uno de los enemigos más grandes que tenemos en la cocina, además de la grasa claro esta, sin duda eso es el óxido en nuestros utensilios favoritos y suele hacernos pasar un muy mal momento cuando lo descubrimos. El óxido, como tal, es un compuesto químico que se forma, cuando el oxígeno se combina con otros elementos, y puede presentarse en 3 principales estados de la materia: sólido, líquido y gaseoso a temperatura ambiente.

¿Por qué se presenta?

Esto tiene varias cuestiones por lo cual aparece, siendo las más populares; el paso del tiempo, la exposición al aire, la humedad o el contacto con productos químicos que pueden causar, en corto o largo tiempo, que provoque una imagen de viejo en nuestros utensilios. Pero esto no tiene porque marcar el fin de su uso, ya que, en algunas ocasiones, no es completamente necesario eliminarlo para siempre de nuestras vidas.

¿Cómo puedo salvarlos?

Si bien, muchas personas pensarían que no tiene más solución y que deberíamos comprar uno nuevo, porque “ya no sirve”. Tenemos excelentes noticias, porque existen 2 maneras para salvarlos y darles un poco más de vida en nuestra cocina, sin tener que llegar al drama de despedirlos y pensar en gastar en otro, innecesariamente. Así qué, toma nota y salva tus utensilios favoritos.

Bicarbonato

Materiales

• Estropajo
• Bicarbonato de sodio (dependerá de lo que vas a limpiar)

Procedimiento

1. Calentaremos agua hasta alcanzar el hervor.
2. Añadimos el bicarbonato de sodio y removemos hasta formar una pasta.

Uso

• Colocamos una parte de la pasta en el estropajo y comenzamos a frotar.
• NO lo hagas de manera muy intensa y hazlo con cuidado en ciertas zonas.
• Deja actuar por 5 minutos.
• Enjuaga y listo.
• Seca con papel de cocina y coloca una porción de aceite de oliva esparcido.
• Sal gorda y limón

Sal gorda (la necesaria)

Material 

• 1/2 limón
• Sal gorda

Procedimiento

1. Cortaremos el limón por la mitad
2. Aplicamos la sal gorda

Uso

• El limón se convertirá en nuestra “esponja” y limpiaremos.
• Frotamos hasta notar que la sal gorda se ha tornado negra.
• Una vez que esto suceda, ponemos otra capa de sal gorda.
• Repetimos el proceso las veces que creas conveniente.
• Dejamos actuar por unos 5 minutos.
• Enjuaga y listo.
• Seca con papel de cocina y coloca una porción de aceite de oliva esparcido.

Y sí, ¿están muy oxidados?

Bueno, para esas personas que creen, que los utensilios con una presentación de oxidación total, también les tenemos una excelente noticia, porque traemos una opción perfecta para que puedas salvarlos y aprovecharlos una vez más.

Material

• Papel aluminio (el necesario)
• Jugo de 1 limón
• Vinagre blanco (el necesario)

Procedimiento

Primera fase

1. Cortaremos el papel aluminio en tiras.
2. Formaremos bolas y remojamos con el jugo de limón.
3. Frotaremos el utensilio o la superficie hasta conseguir quitar una capa.

Segunda fase

1. Sumergiremos ese objeto en un recipiente con vinagre.
2. Deberá cubrirlo completamente.
3. Dejamos toda la noche.
4. Y realizamos el truco de bicarbonato.
5. Y listo.