Guía básica y sencilla para limpiar el pescado de forma fácil y rápida

Limpiar un pescado no parece tarea fácil, y regularmente estamos más habituados a comprar los cortes ya hechos en los supermercados; sin embargo, esto puede jugar en nuestra contra, ya que no aprovechamos bien todo el pescado y resulta más caro que comprar uno entero.

En esta ocasión te compartimos una guía básica y sencilla para limpiar el pescado de forma fácil y rápida, de forma que te ayude a tener una idea sobre lo que debes tener en cuenta para llevar a cabo esta actividad. Te darás cuenta de que entre más repitas el proceso, más fácil te será la próxima vez, pues la clave es la paciencia y la práctica.

Guía básica para limpiar el pescado

1. Elige un buen cuchillo

Sin un buen cuchillo toda la limpieza del pescado será más difícil y tardada. Elige uno que sea delgado y que esté bien afilado.

2. Lava el pescado

Para quitarle la mucosidad y escamas sueltas, enjuaga bien tu pescado frotándolo con agua fría, cuidando de no colocarlo en la tarja, sino usar un recipiente debajo por si se resbala.

3. Acomoda tu pescado

Es importante colocar un trapo limpio debajo de la tabla para cortar al pescado, de esta manera evitarás que se resbale. Luego, acomoda tu pescado de costado sobre la tabla.

4. Descama

Hay herramientas para descamar pescado, pero si no cuentas con una, sólo pasa un buen cuchillo sobre todo el costado en un ángulo de 45 grados, sujetando al pescado de la cola y levantándolo un poco. Pasa el cuchillo de la cola a a la cabeza y termina con el lomo.

5. Vuelve a enjuagar

Enjuaga nuevamente el pescado con agua fría para evitar que las escamas sueltas se introduzcan por accidente al cortar el pescado.

6. Corta las aletas

Algunos la dejan, todo depende para qué quieres el pescado, pero regularmente las aletas se retiran. Sujeta las puntas de las aletas en el aire y corta la base con el cuchillo.

7. Corta desde el vientre

Una vez que localices el vientre del pescado, introduce el cuchillo y haz un corte recto hasta el cuello. Para hacerlo más fácil, coloca el pescado "de cabeza" hacia ti e inclínalo, introduce el cuchillo sin ir tan profundo y desliza hacia el cuello del pescado, procurando no alcanzar las vísceras.

8. Corta la espina

Ahora busca la espina central, ya sea por la cabeza o por la cola, mete el cuchillo por debajo, entre la espina y la carne y desliza con mano firme, pero un movimiento suave y siempre pegado a la espina dorsal.

9. Retira las vísceras

Para evitar perforar el intestino y contaminar el sabor de la carne, retira con cuidado todas las vísceras con tus manos, tomando con los dedos las tripas y órganos internos, retíralos sin apresurarte demasiado.

10. Enjuaga

Este es un paso que no todos hacen, pero te sugerimos que enjuagues el pescado por dentro para dejar bien limpia la cavidad abdominal, especialmente si es la primera vez que lo haces y es posible que se haya contaminado con el sabor de las vísceras.

11. Retira la cabeza

Si no usas la cabeza, córtala y retírala, puede servirte después para hacer un caldo de pescado o un fondo de pescado, pero esto ya lo decidirás.

12. Filetea

Con el espinazo del pescado mirando hacia ti, pasa el cuchillo por la parte posterior del pescado y deslízalo de forma perpendicular (es decir, manteniendo un ángulo recto) y suavemente para ir obteniendo filetes, repite hasta terminar.