El papel encerado puede ser un gran elemento en la cocina, puede ayudarte a preparar cientos de platillos y sacarte de más de un apuro en tus preparaciones, sin embargo, para poderlo aprovechar correctamente debes de saber que tiene algunas características que van a restringir su uso en ciertos escenarios, por eso nosotros te daremos algunos consejos para que puedas utilizarlo al 100%.
No es lo mismo que papel para hornear
Lo primero que debes de saber es que el papel encerado y el papel para hornear son dos cosas muy diferentes, el primero tiene una capa de parafina que lo hace impermeable a los líquidos, mientras que el segundo está tratado de forma química para soportar el calor. Aunque son muy parecidos cada uno tiene sus particularidades y deben de utilizarse en ciertas ocasiones, así que checa muy bien qué tipo de papel estás utilizando antes de usarlo con alimentos.
No debes de utilizarlo con calor
Debido a que el papel encerado contiene una capa de parafina o cera que le da sus características impermeables, no podemos utilizarlo con calor, esto se debe utilizar con alimentos fríos o evitando colocarlo en lugares como el horno o la estufa, así se evitará que la cera se derrita y contamine tus alimentos.
Para alimentos húmedos
El papel encerado es perfecto para guardar algunos elementos húmedos, esto evitará que los líquidos se diseminen por todos lados y los contendrá en los alimentos. Por ejemplo, puedes guardar ciertos embutidos o quesos frescos que continuamente sueltan mucha humedad, por eso el papel es perfecto para envolver este tipo de alimentos en el refrigerador.

Evita que los alimentos se peguen
Asimismo, el papel encerado es muy bueno para envolver algunas cosas pegajosas sin que estás se peguen a él, dado sus características será muy difícil que los alimentos queden adheridos al papel, así puedes utilizarlo para envolver todo tipo de golosinas y caramelos o cubrir elementos con miel, salsa o queso derretido y no se pegarán tan fácilmente.