Este es el secreto de la abuela para preparar un hígado soasado perfecto

¡Ah, el hígado! Algunos lo aman y otros lo odian, pero definitivamente es un alimento que muchas personas asociamos con nuestras madres o abuelitas, que nos obligaban a comérnoslo para que tuviéramos los nutrientes suficientes para lidiar con el día a día y no andar ahí todas anémicas desmayándonos. Si tú eres del equipo que les gustaba el hígado, seguro te preguntarás cómo era que lo cocinaba tu abuelita, que le daba un sabor delicioso.

Y es que la frase de "Es un higadito", que coloquialmente se usa para decir que alguien es de un carácter muy difícil y especial, más o menos tirándole a grosero, seguro la inventó alguien que se dio cuenta de que a muchas personas no les gustaba el hígado de res, pero la verdad es que detrás de estas malas experiencias de personas probando hígado, seguro existía una mala técnica para cocinarlo.

En México se aprovecha toda la carne de los animales y para que no se desperdicie, existen diferentes maneras de cocinarla, según el área de dónde sea y la mayoría de la carne de res, puerco y pollo se aprovecha hasta el final y en el caso del hígado, se trata de una de las carnes más baratas, porque es una viscera de la vaca, que normalmente es bastante desagradable a la vista, pero agradable al paladar, si lo sabes preparar. 

¿Qué beneficios tiene el hígado?

Según algunos nutriólogos, comer hígado tiene un efecto muy parecido en tu cuerpo como el que provoca alimentarse de carne magra, porque contiene un importante número de vitaminas como la A, las del grupo B, como B12 y B6, sin contar las proteínas, minerales y además un bajo contenido en grasa, por lo que comerlo podría ayudar a prevenir la anemia, así que por eso hoy te diremos un truco para cocinarlo y te quede delicioso.

Si por más que le has dado oportunidades, el hígado no te ha quedado, quizá debas saber que es probable que no lo hayas estado cocinando muy bien que digamos, así que este es el día en que tus dudas para cocinar hígado serán disipadas para que no te vuelva a quedar amargo o desabrido. Así que ¡toma nota! para que lo cocines como toda una experta. 

¿Cómo cocinar hígado?

En un recipiente, puedes agregar un tercio de taza con agua y sal disuelta (como media cucharadita). Después de eso, coloca los hígados que vayas a hacer y déjalos reposar por unos 10 o 20 minutos. Más tarde, en un sartén coloca un poquito de aceite y las cebollitas picadas en tiritas. Y entonces sí: Pones el hígado en el sartén. ¡Listo!

Ingredientes para un hígado soasado

• 1/2 cucharada de sal (varía, según la cantidad de hígados que vayas a cocinar)
• 1/3 de taza de agua
• 1/2 cebolla picada en tiritas
• 1/4 de hígado de res