¿Te sobró la mitad de un limón en el refrigerador? Así puedes evitar que se seque

Uno de los mitos más divertidos de la cocina mexicana es que los mexicanos le ponemos limón a todo, y es que cada platillo en nuestra gastronomía se puede mejorar agregando unas cuantas gotas del jugo de esta fruta. Los limones no pueden faltar en nuestro hogar y aprovechamos hasta la última pieza que tengamos en el refrigerador, por eso cuando nos sobra la clásica mitad de limón hacemos de todo para guardarla, así que esta vez nosotros te enseñaremos a almacenarla correctamente para que no se haga fea. 

Es muy común que al partir un limón solo utilicemos una mitad para nuestra receta o aderezar nuestros alimentos, dejando el resto de la fruta en nuestra cocina en espera de que sea usada en otra preparación, sin embargo, al estar partida es más fácil que el limón empiece a perder humedad, se seque y pierda sus propiedades, por lo que guardar este elemento adecuadamente es indispensable para conservar su vida útil ya que incluso en el refrigerador, este proceso puede ocurrir de manera rápida, así que te diremos cómo solucionarlo. 

Cómo guardar una mitad de limón correctamente

Qué necesitarás

• Papel film o película plástica 
• Plato o recipiente de plástico

Lo más recomendable es utilizar esta pieza de limón lo más rápido posible, así evitaremos el desperdicio de comida pero si esto no es viable, entonces tendremos que guardarla en el refrigerador de una manera especial para evitar que el contacto con el aire y las condiciones de temperatura dentro de nuestro electrodoméstico ayuden a secar más rápido al limón para, ello solamente necesitamos un recipiente o plato pequeño y un poco de papel film o película plástica. 

Para guardar la mitad de limón en el refrigerador y que mantenga sus propiedades y sus características por más tiempo basta con qué lo coloquemos en el recipiente y lo envolvamos en película plástica o papel film, no obstante, el truco está en colocar nuestro limón boca abajo con la parte de la pulpa expuesta pegada al recipiente que hemos escogido para su almacenamiento, de esta forma minimizaremos la superficie de contacto entre el aire y el limón.