No son lo mismo: fíjate en este detalle para diferenciar el chile morita del chile chipotle

El chile es uno de los alimentos más icónicos de la gastronomía mexicana y básicamente sin él, no entendemos la comida, porque le dan sabor a muchísimos platillos. Desde la sopa hasta una gran variedad de guisados o algunas salsas para la botanita. Por eso, todos los mexicanos le tenemos una gran estima, porque además, es un elemento que nos encanta disfrutar y lo hacemos como pocas culturas en el mundo.

Según información oficial, existen aproximadamente 100 variedades de chile de las cuales, en México sólo 20 son las más usadas para cocinar, entre las que se encuentran el chile jalapeño, chipotle, pasilla, morita,  serrano, guajillo, ancho, habanero, de árbol, cascabel, manzano, piquín, cascabel, chile de agua y un largo etcétera. Sin embargo, cuando no los conocemos muy bien, podríamos confundir unos por otros. 

Y es que usar chiles para hacer salsas y/o sazonar comida es todo un arte, porque pueden llevar todo un proceso que le da un sabor o textura diferente. Se pueden usar chiles secos, tatemados, en vinagre, escabeche y hasta frescos o crudos, todo depende de qué es lo que quieras, pero lo que sí debes saber es que dependiendo de la frescura o el tratamiento que se les dé, el nombre del chile podría cambiar. 

Es decir, un jalapeño, se puede convertir en chipotle o chiles en vinagre o chile relleno, lo mismo que un morita. Aquí es donde las cosas se ponen complicadas, porque para lograr el resultado que queremos con nuestras salsas y guisados, es necesario identificarlos bien de principio a fin y por eso, al menos hoy te diremos cuáles son las diferencias entre el chile morita y el chile chipotle, porque los dos se parecen y hacen un caldito rojizo cuando hacemos salsa, pero no son, ni saben a lo mismo y ahora entenderás por qué. 

1. Su aspecto 

El chile morita, por lo regular es seco y de color oscuro. Por lo general mide entre 4 y 7 centímetros de largo, mientras que el chile chipotle es ahumado y además, casi siempre estará humedecido por una salsa roja oscura. Se trata del caldito que siempre vemos cuando nos servimos este tipo de chiles en algún taco o plato.  

2. Su elaboración

Tanto el chile morita, como el chipotle, pueden venir del chile jalapeño. El asunto que los separa es que mientras el morita se deja secar totalmente y a veces se ahuma, el chipotle necesariamente tiene que ser ahumado y además, puede elaborarse con otros tipos de chiles, como el serrano o el pasilla. Casi siempre va aliñado con escabeche o vinagre, piloncillo, más hierbas de olor. 

3. El nivel de picor

El chile morita tiende a ser más picoso, que el chipotle, porque no va aliñado con el piloncillo, como es el caso del segundo.