Para este 2 de febrero prepara un atole perfecto y sin grumos con estos consejos

El próximo 2 de febrero se celebrará el Día de la Candelaria y esta, literalmente, a la vuelta de la esquina. Este día representa el final de las fiestas decembrinas y, también, se trata del momento en que muchas personas aprovechan este día para disfrutar sin remordimiento alguno los tamales verdes, de rajas, de mole, dulce y más. Por supuesto, nada de esto sería perfecto, si no estuviera acompañado de un delicioso atole. 

El atole, es una de las bebidas que data desde la época prehispánica y, que desde nuestros ante pasados, se ha destacado como una de las favoritas de nuestro país. Su consistencia a base de maíz, lo han consolidado como una de las mejores bebidas que existen. El problema que en realidad presenta el atole, es la parte de su preparación, la cual, no suele ser tan sencilla como muchos lo pensarían. Incluso, de hacerla de manera correcta, puede tomar algún tiempo. Sin embargo, existen algunos trucos que harán, que tu atole quede perfecto. 

Base

Dependiendo de la consistencia y textura que le quieras dar a tu atole, entonces deberás elegir la base. Si quieres una consistencia mucho más simple, entonces te recomendamos hacerlo con una base de agua, pero si quieres que este tenga una consistencia mucho más cremosa, entonces te recomendamos hacerlo con leche.

Dulce 

El atole tiene como principal objetivo ser dulce, por lo que necesitamos colocarle una buena cantidad de dulzor y para ello, puedes utilizar algunos elementos como leche condensada, azúcar, miel o piloncillo. Cualquiera de las 4 puede ser una gran opción para darle un toque perfecto. 

Espesor 

Como muchos saben el atole necesita tener una consistencia mucho más espesa, por ello, puedes utilizar la tradicional fécula de maíz. Sin embargo, si no eres aficionado de este tipo de alimentos, entonces puedes sustituirlo por harina de arroz, harina de avena y maíz fresca. 

Sin grumos 

Esto, quizá es de lo más complicado al momento de hacer el atole y, de lo que muchas personas, suelen sufrir cuando lo preparan. Pero existe un truco que pocas personas saben, y es que, el truco para que quede perfecta, es diluir la fécula de maíz, la harina o el elemento que utilices, previamente a incorporarlo al atole. Puedes hacerlo con leche o agua.