Consejos para conseguir una tinga deliciosa y que no pique

Durante las fiestas patrias, el pozole es uno de los platillos más populares que hay, pero aledaños a él también existe una de las guarniciones más famosas para las tostadas: La tinga. Esta última es pollo deshebrado con cebolla picada en tiritas; todo bañado en salsa de jitomate con chipotle y francamente el sabor es delicioso y muy mexicano. No hay nada que se le iguale y honestamente es un guisado que le queda a todo: Quesadillas, tostadas y de paso hasta flautas. 

La tinga, en general se puede elaborar con carne de res, pollo o cerdo, toda deshebrada y se trata de un platillo sencillo, pero muy popular en el centro de México. Al parecer su origen es poblano, como el de muchas otras delicias mexicanas, pues su primera documentación es en el libro de cocina 'La cocinera poblana' de 1881, donde describen al menos siete recetas diferentes, como la escandalosa, que lleva papas, la poblana, que se parece mucho a la conocemos, pero que lleva pescado, la caliente, etc.

Actualmente la tinga poblana lleva cebolla, chile y jitomate y se prepara a base de carne de cerdo deshebrada. Muchas personas la preparan con longaniza, y cebolla finamente rebanada que le da un sabor especial, pero de lo que nunca nos libramos es de su sabor picosito, porque entre los chiles que más se acostumbran para ella, están los del tipo: serrano, jalapeño o el clásico chipotle. Sin embargo existen algunas personas que no pueden o no les gusta comer chile. 

Por eso, con esto de la agenda inclusiva a la que se nos está orillando a entrar, vemos a bien compartir contigo una receta para que si tú eres del grupo que por razones de salud o por preferencias, puedas consumir este típico platillo en estas fiestas patrias sin temor a salir corriendo por la enchilada que te puedes acomodar. Así que más vale que nos prestes atención, para que nada de esto te pase en tu cena septembrina. 

Tip 1: Ponle muy poquito chipotle

Si estás acostumbrada a cocinar la tinga con chipotle de lata y normalmente le echas unos 180 gramos puedes disminuir la cantidad o bien, echarle sólo uno o dos chilitos chipotle para que no pique tanto, como normalmente la comemos. Esto hará que el resto de los chiles repose en la latita en lugar de que se mezcle en la salsa que va en la licuadora, que va directamente al sartén. 

Tip 2: Acitrona la cebolla con azúcar o un poco de piloncillo

Si quieres una tinga un poco más dulce, puedes empezar por acitronar la cebolla antes de llevarla al sartén, pero eso sí, recuerda reducir un poco la estancia de los chiles chipotles en la salsa, para que al mezclarse con la cebolla, la tinga quede con un agridulce que sea más dulce, que agrio o ácido. El azúcar le dará un toque particular y especial al guisado de tostadas más famoso de México.