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No más avena caliente: 4 maneras diferentes de preparar este saludable cereal
Aprovecha los beneficios de la avena mientras experimentas con nuevas formas de disfrutarla.
La avena es uno de los cereales más saludables que tenemos a nuestra disposición por sus nutrientes y propiedades, este alimento es capas de ayudar a tu sistema digestivo, mejorar tu salud arterial y aportar un sinfín de beneficios más, no obstante puede volverse tedioso consumirla constantemente sobre todo si siempre la cocinamos de la misma manera: caliente, ya que esta es la forma más popular para comerla, por eso te diremos otras formas en las que puedes aprovechar sus beneficios.
En jugos
Este uso también también puede ser muy versátil aunque no goza de tanta popularidad como la avena caliente, basta con que agregues un par de cucharadas de avena en cualquiera de tus jugos favoritos para que este cereal aporte grandes nutrientes a tu salud y no te preocupes por combinarlo solo con leche, su sabor hace a la avena un ingrediente perfecto para cualquier tipo de jugo, desde los ácidos y frutales hasta los cremosos y suaves.
Fría
El pudín de avena o compota de avena no tiene que ser siempre caliente, una forma de cambiar su sabor y textura drásticamente es simplemente evitando la cocción de la avena, para que pueda funcionar necesitaras usar avena instantánea, prepárala con menos líquido del que acostumbras y déjala reposar unas horas antes de disfrutarla puedes agregar fruta fresca y esto la hará mucho más deliciosa.
Galletas y panes
La avena también puede ser un ingrediente excelente cuando se trata de la panadería y la repostería, puedes molerla o usarla entera para hacer versiones más saludables de tus panes y galletas favoritas, de esta manera podrás aprovechar sus beneficios mientras disfrutas de deliciosos y dulces preparaciones, incluso la puedes usar para elaborar las bases de tus pays o incluirla en tus pasteles.
Ensalada
La avena no es solo para preparaciones dulces, este cereal combina a la perfección con platillos salados, una de las formas más fáciles de integrarla en este tipo de comida es en las ensaladas, tendrás que cocerla por unos minutos primero para que la puedas digerir bien, pero una vez fría le dará a tus preparaciones saladas una textura y sabor muy especial, pero sobre todo saludable.
