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Tips para maridar vinos espumosos con postres; hazlo como todo un profesional
Encuentra la manera perfecta para maridar los vinos espumosos con postres siguiendo estos sencillos consejosAl momento de servir cualquier comida o cena, hay un elemento muy importante que se debe tomar en cuenta para lograr que los platillos sean espectaculares y este elemento es el maridaje. El maridaje consiste en el arte de combinar a la perfección los ingredientes de un platillo con un vino que potencialice estos sabores, es por eso que a veces puede ser una tarea complicada, pues hay muchos aspectos a considerar. Aquí lo importante es lograr realzar los sabores de ambos, tanto el vino como la comida, sin que ninguno le reste importancia, sino que se complementen y formen una fusión espectacular en el paladar.
Cuando se trata de platillos salados, esta tarea es un poco más común y resulta más sencillo. El reto viene cuando se trata de maridar postres con vinos, pues suele haber muchos contrastes en el nivel de dulzor, acidez y sabores, así que implica mayor atención al momento de seleccionar un vino para postre; aunque tampoco es tarea imposible. De hecho, una de las opciones más recurrentes es el maridaje de vinos espumosos con postres y aquí te daremos algunos consejos que pueden hacer tu vida más sencilla al momento de seleccionar el maridaje ideal para tu postre favorito.
Realmente, los vinos espumosos son famosos por poder combinarse con casi cualquier tipo de comida o platillo y cuando se trata de postres, no es la excepción. Así que hay que tomar en cuenta ciertos aspectos que mencionaremos a continuación, para lograr disfrutar al máximo de la combinación:
Grado de acidez: la acidez que contenga un vino siempre es un factor indispensable a considerar para el maridaje y cuando se trata de postres, se recomienda que vinos espumosos con un grado de acidez elevado, se acompañen con postres que tengan frutas o elementos con un alto grado de acidez, como por ejemplo, emplear limón o maracuyá.
Intensidad: es importante tomar en cuenta qué tan intenso es el vino, ya que en caso de contar con un vino espumoso con sabores muy potentes y un postre de sabor sutil, el vino opacara al postre. Es por eso que se debe encontrar un equilibrio entre ambos. Cuando se trata de postres con sabores muy estructurados, el vino debe ir a la par.
Nivel de azúcar: el nivel de azúcar que contenga un postre es sin duda un factor determinante al momento de maridar, pues existen postres que son sumamente dulces y otros con un nivel de azúcar moderado. Aquí el truco está en acompañar tu postre con un vino que no compita con la cantidad de dulce de tu postre, sino que formen una armonía. No debe estar muy por debajo ni por encima del grado de dulzura del postre.
Estos son algunos sencillos tips que sirven como base para poder comenzar a hacer un maridaje adecuado, aunque también es importante hacer pruebas con distintos vinos espumosos hasta que encuentres la combinación perfecta con tu postre elegido. Existen ciertas reglas de maridaje pero lo importante también es ver cómo se comporta la combinación de sabores en tu boca y lograr una armonía ideal entre ambos.