Tips para conservar la cebolla por más tiempo y evitar que su olor se impregne en el refrigerador

Es muy común que, si estamos preparando alguna receta que use cebolla entre sus ingredientes, ocupemos solamente una parte de la misma y no la pieza completa, si al hacer esto partimos una cebolla entera entonces el resto de la cebolla tendremos que almacenarla en el refrigerador, pero, ¿Cómo hacer esto de la manera correcta sin llenar nuestra nevera de un intenso olor a cebolla? pues aquí tenemos los tips perfectos para ti.

Papel absorbente

El papel absorbente será tu mejor aliado cuando se trate de guardar cebollas, no solamente cebollas ya partidas, sino también cebollas enteras y tus vegetales en general, es recomendable colocar una base de papel absorbente en el compartimento de vegetales y así evitar el exceso de humedad, esto ayudará a conservar mejor tus alimentos y extenderá su vida útil.

Recipientes herméticos

La mejor opción para guardar las cebollas ya partidas son los recipientes herméticos, de esta manera las cebollas se mantendrán en buen estados y evitarás en mayor medida que su intenso olor quede en tu refrigerador y se impregne en él, recuerda que es esencial colocar una base de papel absorbente incluso dentro de tus recipientes para ayudar a absorber toda la humedad que nuestra cebolla ya partida pueda tener.

Bicarbonato de sodio

Aunque guardes tus vegetales en bolsas y recipientes por separado es normal que estos desprendan ciertos olores que se terminarán impregnando en tu refrigerador, una forma de vitar esto es colocando bicarbonato de sodio dentro, este ingrediente te ayudara a neutralizar y absorber los olores, para poner en práctica este consejo solo coloca un recipiente pequeño con un par de cucharadas de bicarbonato y déjalo actuar dentro de tu nevera toda la noche.

Limón con clavo

Otra forma de combatir los malos olores en tu refrigerador es sustituirlos por olores más agradables, para ello el limón con clavo es rey, este te ayudara a neutralizar los olores desagradables como el de la cebolla o el pescado, solamente necesitas partir un limón por la mitad y encajar unos cuantos clavos de olor en una de las mitades, coloca ambas mitades en el refrigerador y déjalas por una noche, al día siguiente los malos olores se habrán ido.