Tips de cocina

Trucos fáciles con los que lograrás un pollo al horno jugoso y perfecto

¿Nunca queda como te gustaría? ¡No más pretextos! Consigue ese doradito que siempre quisiste
martes, 8 de junio de 2021 · 20:48

El pollo es uno de los alimentos más utilizados en la cocina mexicana, pues hay diversas formas de prepararlo; ya sea con mole, frito, en caldo o empanizado. Sin embargo, cuando queremos hacerlo al horno puede quedarnos seco, crudo o, incluso, quemarse, puesto que no es un platillo de fácil preparación. Por eso, aquí te compartiremos algunos consejos para que tu guiso quede perfecto y sorprendas a todos tus comensales.

Este alimento de origen animal contiene nutrientes como proteínas, lípidos y minerales como calcio, hierro, zinc, sodio, potasio y magnesio, entre otros. Además, de acuerdo con el Consejo Mexicano de la Carne, el pollo es saludable, de fácil digestión, accesible y versátil, por eso, sin más que decir, vayamos a los consejos para que tu guiso al horno quede justo en el punto: jugoso y doradito.

¿Cómo condimentar el pollo? 

La mayoría de las veces, cuando queremos darle sabor a nuestro platillo, ponemos sal y pimienta en el exterior, este es uno de los errores más comunes, pues cuando éste se cocine quedará seco. Lo ideal es que condimentemos el interior del pollo, así el sabor perdurará y lograrás la jugosidad que deseas. Puedes usar tu ingrediente favorito, ya sea chile picado, laurel, orégano o hasta paprika.

¡Precalienta el horno!

Es importante que recuerdes precalentar el horno, hasta que alcance los 180 grados, antes de meter tu pollo; este es un paso muy importante que definirá qué tan jugoso quedará tu platillo. Recuerda que cada horno es diferente, por lo que el tiempo de cocción puede variar ligeramente. Revísalo cada 30 minutos y cuando observes que está llegando al punto esperado, aumenta la temperatura y espera 15 minutos hasta que se dore.

Hidrátalo 

Mientras tu pollo se cocina en el horno, puede comenzar a secarse y quedar poco jugoso al momento de sacarlo. Para evitar esto, frótalo con tus manos con aceite de oliva, mantequilla, caldo, manteca o agua. No olvides hacer este proceso por todo el pollo para que no queden partes secas y jugosas.

Deja que repose 

Antes de poner tu guiso en el horno y después de condimentarlo e hidratarlo con tus ingredientes favoritos, permite que el pollo repose durante, por lo menos, una hora, pues esto ayudará a que los sabores se mezclen e impregnen mejor en la carne. Puedes dejarlo a temperatura ambiente; sin embargo, si hace mucho calor, mételo al refrigerador.