Huerto en casa

Huerto en casa: cultiva tu propio mamey de forma sencilla con este paso a paso

Aprovecha la temporada de este fruto para no desperdiciar nada y comenzar con tus propios cultivos
viernes, 4 de junio de 2021 · 13:44

El mamey es una de las frutas de temporada que no pueden faltar en casa, ya que esta cuenta con un sabor muy dulce que la hacen ideal para comer a mordiscos o bien para la elaboración de diversas preparaciones como dulces, batidos, helados e incluso aguas frescas perfectas para relajarte durante los días de calor intenso. Sin contar que es una de las frutas con una buena cantidad de beneficios que seguro no querrás pasar por alto.

Su forma ovalada, con una piel áspera de color café claro, cuya pulpa es de color rojizo, así como una semilla oscura que si se rompe alberga una especie de almendra popularmente conocida como pixtle, la cual es utilizada para la elaboración del agua de hueso de mamey. Este fruto es originario de Mesoamérica, más específicamente de las selvas de Chiapas, Tabasco y Veracruz, donde aún se pueden ver algunas especies que crecen de forma silvestre.

Según los datos de El Poder del Consumidor, la producción de mamey en México llega a las 17 mil toneladas por año, siendo Yucatán uno de los principales productores de esta fruta, seguido de Guerrero, Quintana Roo, Chiapas, Michoacán y Tabasco. El mamey es una buena fuente de carbohidratos, vitamina A, C, calcio, hierro, fósforo, así como carotenos y antioxidantes que ayudan al correcto funcionamiento de los órganos del cuerpo.

¿Cómo sembrar mamey en maceta?

Lo que necesitas

  • 1 maceta de unos 30 centímetros de ancho y alta
  • 1 hueso de mamey
  • Tierra de hojas, la necesaria
  • Papel de cocina absorbente
  • 1 recipiente con tapa hermética 

Germinado

1.- Para obtener la semilla de mamey, solo basta con que guardes la misma de uno de los mamey que hayas usado en casa, solo recuerda lavarla muy bien para eliminar los restos de la pulpa. 

2.- En un recipiente hermético, coloca una capa de papel de cocina y humedece. Coloca el hueso de mamey y cubre con más papel. Vuelve a humedecer y cubre a la perfección el hueso. Tapa el recipiente y colócalo en un lugar fresco y cálido para que la semilla comience a germinar. 

3.- Revisa cada dos días el crecimiento de las primeras raíces del hueso de mamey, así como evitar la acumulación de moho o algún hongo que pueda dañar el hueso. Si esto sucede, solo deberás cambiar el papel y volver a humedecerlo para cubrir el hueso y que siga con su proceso de germinación. 

Planta

1.- Unas dos semanas después, verás cómo las raíces del mamey comienzan a brotar, así que es hora de comenzar con la plantación. 

2.- Llena la maceta con tierra de hojas hasta ¾ partes de su capacidad. Siembra la semilla de mamey a unos 5 centímetros de profundidad y cubre con la tierra, pero recuerda que no debes aplastarla ya que debe estar ligeramente suelta para que los primeros brotes comiencen a sobresalir. 

3.- Humedece la tierra, pero sin llegar a inundar toda la maceta ya que solo necesita estar lo suficientemente húmeda para comenzar a brotar de la forma adecuada. 

Cuida

1.- Coloca tu maceta en un lugar donde pueda tomar una buena cantidad de sol, se mantenga cálida y sobre todo húmeda, así que tendrás que regar de forma constante cada vez que notes que la tierra comienza a secarse. 

2.- En un periodo de unos dos meses, notarás como tu planta comienza a fortalecerse, así que necesitarás abonarla al menos dos veces al año para que siga creciendo de la forma más adecuada. Toma en cuenta que este tipo de cultivo puede tomar entre dos y tres años para que comience a dar sus primeros frutos, así que tendrás que ser paciente.