Lo primero que debemos tomar en cuenta es la calidad de nuestros camarones, la calidad es igual a frescura y eso nos va a dejar limpiar de la manera más adecuada nuestros camarones ya que si es un camarón que lleva mucho tiempo refrigerado o fuera del refrigerador, puede estar muy aguado o echado a perder y al momento de limpiarlos puede contaminar toda nuestra receta.
Primer paso
Primero tenemos que desprender la cabeza del camarón con mucho cuidado y para eso tomamos la cabeza con dos dedos, la giramos y solita se va a desprender.
Segundo paso
Tomado de las patitas del camarón, vamos desprendiendo la cáscara o piel de forma que empezamos desde la cabeza hasta la cola, esto nos facilitará retirar la cascara
Tercer paso
Una vez que el camarón no tenga la cáscara, vamos a retirar la tripita y para esto hay dos formas muy sencillas:
Una forma es tomando un palillo, atravesamos el camarón por la mitad y jalamos la tripa.
La otra forma es cortando de cabeza hacia la cola hasta que lleguemos a la tripa y con el mismo cuchillo retiramos la tripa.