La naranja es una de las frutas que se consumen con más regularidad en la cultura occidental. Sus sabores amargos y dulces no solo se pueden disfrutar al comer la fruta tal cual, sino también en diversas preparaciones, aunque regularmente destaca el uso de su jugo para beber como zumo o para darle sabor a otros alimentos.
Guisados como Cochinita Pibil, el adobo de pastor, el conejo enchilado o filetes marinados; todos ellos se elaboran con este líquido. Además, también se le da varios usos en el mundo de la coctelería, especialmente por sus notas de olor y color que pueden hacer de cualquier trago algo novedoso y exquisito.
No importa en cual de todas estas formas decidas usarlo, aprovechar al máximo las propiedades líquidas de este jugo es algo que nadie debería perderse y para no desaprovechar algunas gotitas que, aunque suelen quedarse sin exprimir entre sus gajos, saben delicioso y son igual de nutritivas; te dejamos algunos tips para obtenerlas todas.
Propiedades y beneficios
Antes de pasar a estos consejos, no queremos desaprovechar la oportunidad de demostrarte las maravillas de la naranja y de su jugo. Para empezar, sabemos que es conocida por su alto contenido de vitamina C, la cual es ideal para reforzar el sistema inmunológico y levantar las defensas. Tan solo en un vaso de jugo podemos encontrar el 60% de la cantidad diaria recomendada de esta vitamina, ideal para ayudar al crecimiento de tejidos, sanar heridas y puede ayudar a reducir la duración de un resfriado.
No obstante, esta fruta también goza de otras grandes propiedades, como su contenido en calcio, magnesio, ácido fólico, fósforo, entre otros elementos, además de otras vitaminas como la B1, B2 y B9, que favorecen al buen funcionamiento del cuerpo. Incluso contiene vitamina A, que contribuye a la salud ocular.
Por otro lado, su alto contenido de fibra ayuda de gran manera a normalizar los niveles de colesterol en la sangre, debido a la presencia de pectina. También puede prevenir la aparición de cálculos renales, pues de acuerdo con un estudio publicado por la Sociedad Italiana de ecografía, urolología y nefrología, la naranja puede aumentar el PH en la orina haciéndola más alcalina, lo cual ayuda a prevenir esta enfermedad.
Después de conocer todos estos datos, estamos seguros de que no querrás desaprovechar ni una sola gota de sus beneficios, ¿listo para saber cómo obtener todo su jugo?
Aprende a sacarle todo el jugo
1. La temperatura ideal: Lo mejor que puedes hacer para obtener todo el jugo de las naranjas es exprimirlas hasta que estén a temperatura ambiente, aunque también puedes pasarlas unos segundos debajo del grifo con agua caliente. Así se exprimirán con mayor facilidad y podrás sacar más cantidad.
2. Córtalas correctamente: Un error muy frecuente que cometemos con cualquier tipo de cítrico es cortarlos a la mitad y entonces exprimirlos con las manos para obtener su jugo. Contrario a esta popular idea, lo correcto es cortarlas por o menos en cuartos y entonces exprimirlas; verás cómo sale mucho más líquido.
3. Para hacer jugos: En estos específicos casos, existe una forma muy sencilla de aprovechar absolutamente todo su jugo. Comienza por rallar la naranja, corta la cabeza y el rabo y luego pélala sin dejar ni un solo pedazo blanquecino. Posteriormente corta en rodajas o trozos toda la fruta, lleva a la licuadora y cuela.
