No solo tienen carne, los nuggets de pollo también contienen proteína de soya y piel: reporta Profeco

Muy probablemente no existe persona en el planeta que no conozca los nuggets de pollo, este alimento que fue inventado en 1960 por un hombre que lleva el nombre de Robert C. Baker, un científico de la Universidad de Cornell en Nueva York. Lo increíble de este platillo, fue que buscaban mantener unida la carne picada sin piel y el resultado; los nuggets. Con el paso de los años se ha modificado la formula, pero son de los favoritos de todos en los restaurantes de comida rápida. Pero, ¿sabías que no son tan malos como los pintan?

De primera instancia debes saber que los nuggets son un producto cárnico empanizado y frito. Algunos están hechos a base de pechuga de pollo, otros tantos tienen pechuga de pollo y otras carnes como costilla y/o piel, se presentan como una alternativa "rápida" para disfrutar en la hora de la comida. Los principales consumidores resultan ser lo niños, ya que resulta un alimento llamativo, práctico y delicioso. Al ser un producto tan popular, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) se dio a la tarea de analizar algunas marcas de nuggets congelados y el aporte nutrimental que pueden tener en nuestro cuerpo. 

El informe arrojó que otros ingredientes con los que suelen hacerse los nuggets son agua, sal, harinas, especias, féculas de papa, almidones, saborizantes y proteína de soya. Como todo producto, cuenta con diversas especificaciones sobre las calorías, las grasas trans, grasas saturadas y sodio, lo que te permite elegir de la manera en que prefieras tus alimentos. La evaluación de los nuggets arrojó que su aporte nutrimental es de una alto contenido de proteína, grasa, carbohidratos, aporte calórico y sodio. 

También se verificó que todos los productos empaquetados de los nuggets tuvieran la información correcta del etiquetado como:

• Denominación del producto
• Lista de de ingredientes 
• Modo de preparación del alimento
• Nombre y dirección del fabricante o comercializador 
• País de origen
• Número de lote 
• Caducidad y contenido del producto 

Por último, la Profeco da unas últimas consideraciones, al momento de comprar nuggets empaquetados leer la etiqueta, pensar en el número de calorías añadidas , tener especial atención con el tema del sobrepeso, checar la fecha de caducidad, conservarlos en una temperatura adecuada, vigilar el contenido de sodio y, finalmente, checar tu economía, si puedes elegir un producto más barato, pero con una tabla buena, será ideal para ti. Lo que no necesitas, mejor no adquirirlo.