El fin de semana ya comienza a sentirse y si tú ya estás haciendo planes para la comida de los próximos días, te sugerimos preparar una carne asada pero con una preparación poco convencional. Los cortes asados en horno son la opción ideal para todos, pues no importa si no tienes espacios abiertos, contar con este utensilio en la cocina es suficiente para disfrutar de un verdadero manjar.

Esta técnica es también mucho más sencilla y saludable que otras, y puede usarse con distintas variedades de carne. Sabemos que es un estilo no tan conocido y por eso, a continuación te brindamos 7 tips para comenzar desde hoy y volverte todo un profesional. De esta manera, una vez que puedas tener invitados en casa, los sorprenderás con tus nuevas habilidades.

7 tips para asar la carne en el horno como todo un profesional

Elige piezas de calidad

Lo primero es optar por aquellas piezas que puedan adquirir un gran sabor, por ejemplo, aquellas que están recubiertas por capas de grasa, que sean grandes y, sobre todo, jugosas. De la ternera las partes idóneas para asar son babilla, contra, lomo, solomillo y espaldilla; del buey y de la vaca se recomienda utilizar piezas como el redondo, el solomillo y el lomo, la cadera, la espaldilla, la tapa y la contra y del cerdo son recomendables la paletilla, la presa ibérica, la pierna, el lomo o el costillar.

Prepara los ingredientes

Un día antes marina la carne en una mezcla de agua, jugo Maggi y romero. Después, ata bien la carne para evitar que estos jugos (y los de la carne) pierdan su forma. También puedes sellar la carne en aceite o manteca unos 10 minutos a fuego alto.

Antes de cocinar...

No olvides que antes de meter la carne al horno, es de suma importancia precalentarlo antes, pues de lo contrario le costara sellarse. Por otro lado, si tu corte tiene hueso, recuerda colocarlo con éste hacia abajo.

La temperatura ideal

Si no tienes mucha experiencia con este tipo de preparaciones, debes saber que lo ideas es asar una pieza de un kilo a 180° C durante 45 minutos. En caso de que no tengas prisa y prefieras un manjar mucho más jugoso, puedes cambiar la temperatura a 120° C y dejar unas dos horas.

Permanece al pendiente

Para conseguir un  platillo cocinado uniformemente, deberás permanecer al pendiente y cuidar darle vuelta a la pieza de 1 a 2 veces para que se cocine por todos lados. A la par, rocía la carne en su propio jugo, al menos 3 veces, esto hará que quede más jugosa.

¿Está lista?

Antes de que transcurra el tiempo de preparación jamás deber usar palillos para pinchar o realizar cortes para verificar el estado de la carne, ya que en ese caso, todos los esfuerzos por mantener un platillo jugoso se perderán. Lo mejor es esperar a que hayan pasado los 45 minutos (o las dos horas) y entonces pinchar el centro para evaluar los jugos.

En caso de que éstos sean rojizos significará que necesita una mejor cocción; si son rosados está a punto y si son incoloros la carne estará perfectamente cocinada.

Previo a servir

Deja reposar la carne una vez que la hayas asado. Puedes envolverla en papel de aluminio y esperar 15 minutos antes de servirla para conservar todo el sabor y los jugos que tan profesionalmente has cuidado.