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¿Qué tipo de copa se usa para cada vino? Te explicamos las claves

Disfruta de tu vino como se debe con su respectiva copa y de una manera mucho más rica
miércoles, 21 de abril de 2021 · 17:20

Alguna vez te has preguntado porque para un vino te dan un estilo de copa más alargado, para otro una más pequeña y para una tercera un tanto más gruesa. Bueno esto va de la mano en que de esta manera podrás percibir mucho mejor los sabores de cada vino o incluso el frío de cada uno y de cuánto deberá permanecer. Todos los vinos son diferentes desde el tiempo de añejamientos hasta la uva con al que fue procesado y por ello debes saber qué tipo de copa le va a cada uno y ahora te vamos a explicar con más detalle, cuál sería la perfecta para ti.  

Copa Borgoña

Es una copa grande, de cáliz voluminoso y algo barrigudo, cuenta con un cuello ancho y su tallo es proporcionalmente largo. Este tipo de copas se usa para los tipos de vino pinot noir, o sea los más añejados. Su sabor es un tanto fuerte, pero su aroma es sumamente suave y lo podemos percibir al retenerlo por un tiempo en la boca. Este tipo de copas le permitirá que suban más lo aromas y dejará que el vino respire y tenga un poco más de aire. Aquí van desde los de tipo Rioja, Ribera y hasta los Priorato.  

Copa Burdeos

A diferencia de la borgoña, el cáliz es más alargado y alto, el cuello es cerrado y no tan estrecho. Este tipo de copas va mucho mejor para los vinos tintos, en especial todos los españoles o los vinos jóvenes.. El tipo de vino es con mucho más cuerpo y de aroma más potente, pero sin llegar a saturarnos el paladar. Las variedades que puedes servir aquí son del tipo garnacha, tinta fina y otras variedades.

Cabernet Sauvignon

Este tipo de copas son muy similares a la burdeos, pero su tamaño es algo menor. Se usa para los vinos más temperados, ligeros en estructura pero con sabor. Es ideal para el tipo de vino Penedés, así como los tintos atlánticos de Ribeira Sacra y Rías Baixas. Este tipo de vinos les conviene tenerlos a menos temperatura y por ello de menor volumen de cáliz. 

Chardonnay

Este tipo de copas tiene un tallo algo bajo, un cális algo chato y el cuello mucho más amplio. Se utiliza así porque los vinos suelen ser más afrutados y ligeros, puedes percibir sus aromas al primer sorbo, por ello no es necesario un cuello estrecho. Es una copa más pequeña a diferencia de la de los tintos, por lo mismo del volumen del vino. Los tipos de vinos son blancos afrutados como los rueda y por supuesto, la variedad de Sauvignon. 

Blanco Seco 

Este tipo de copas son de mayor volumen, un tallo alto y una base de cáliz ancha y barriguda para acabar en un cuello en cilindro que se cierra en estrecho. La idea de esta copa es permitir que el vino respire bien en el interior, ya que no suelen ser vinos excesivamente aromáticos, pero los puedes disfrutar con cada sorbo. No importa si la copa es más grande o más pequeña, pero nunca la llenes en exceso. Ideal para los tipos de vino blancos secos como Rioja, Navarra o Terra Alta y, claro, los verdejos puros y duros, también entran aquí los gallegos . 

Sauternes

Este tipo de copas sería una intermedia hacia las copas más pequeñas que corresponden a vinos especiales. Podríamos describirla como la copa del blanco seco en versión más pequeña pero sin el cáliz barrigudo ni el cuelo estrecho, sino algo más proporcionada. Se usa para sauternes en Francia pero sirve también para cualquier otro vino dulce en general, ya sea con azúcar residual o añadido después. Por ejemplo, el moscatel, algunos blancos basados en pedro ximénez, etc. 

Flauta

Es la típica copa de cava o champaña, con un cáliz se trata de una larga chimenea para que el gas pueda tener su salida pero sin perder la bravura de inmediato. No obstante, hay variaciones que contemplan un tallo más largo y un cáliz menos alargado pero más barrigudo. Se usa principalmente para los vinos de cavas más jóvenes y los frissantes italianos. 

Jerez

Este tipo de vinos se distingue por su grado de oxidación sobre la base de una fermentación maloláctica en la crianza. La copa es pequeña, de cáliz alargado pero corto y de tallo corto y grueso. El grosor del cristal puede ser algo mayor para mejorar la temperatura, ya que se toman desde frescos a templados, lo vinos podrían ser del tipo de los de Montilla-Moriles

Oporto

Este tipo de copa podría ser muy similar a la del Jerez pero más ancha de cáliz y con el cuello que después se va cerrando para concentrar el aroma. Es una copa que puede servir también para otros vinos fortificados, de potente aroma y dulzor como el pedro ximénez, el Tokaj, etc.

Madeira

Este tipo de vino es fortificado, denso y potente, aunque no tan dulce como puedan ser los oportos más jóvenes. Puede tomarse en copa de oporto, pero también cuenta con una propia, que muy parecida a la anterior, sufre un estrangulamiento en el centro para luego abrirse en el cuello, con el fin de ofrecer mejor el aroma. Puede servir también para oportos, tokaj, moscatel, etc.