¿Cómo limpiar las puertas de madera de tu alacena sin que se estropee la madera?; sigue estos tips

Todos sabemos la (ch#"$) batalla campal que le metemos día con día a nuestra cocina para sacarnos de apuros diariamente, que no es poca cosa. A ti te parece que nunca se ensucia o que se percude de a poquito. Sin embargo, esto ocurre y el día que menos te lo esperas, las puertas de la alacena comienzan a tener manchas que brillan a contraluz del rayito de sol que entra discretamente a tu cocina y no, no es por la limpieza. 

Lamentamos decirte que la grasa también brilla y es pegajosa. Nadie la quiere en su cocina, porque se ve y se siente mal. Por eso es que algunas personas que tenemos un TOC con la limpieza, hemos decidido que quitaremos toda mancha del lugar donde preparamos nuestros alimentos así sea lo último que hagamos (Léase con voz de villano). Y cuando decimos todas las manchas, significa TO-DAS. 

Sí, sabemos que hay no sólo manchas que son complicadas de quitar y si a eso le sumamos superficies difíciles, como la madera, parece que el mundo ha confabulado en nuestra contra y que no quiere que nuestra cocina esté reluciente. Sin embargo, claro que todo se puede y por eso es que hoy hemos decidido compartir contigo algunos tips para que puedas limpiar las superficies de madera, como la de tu alacena, por ejemplo.

La alacena es uno de los lugares que más se ensucia, por ser un daño colateral de la comida frita, porque se suele ensuciar de cochambre o de líquidos pegajosos, como la miel, si se derrama del frasco o recipiente donde normalmente la tienes. Por esta razón siempre viene bien la ayuda y no sólo de unas manos extra que te ayuden a cubrir todas las partes de la cocina que hay que limpiar, sino de conocimientos o remedios precisos para acabar con la grasa, pero sin hinchar o maltratar la madera, que es tan delicadita. Tus deseos fueron órdenes, así que ¡Toma nota!

1. Escurre muy bien tu franela

Con una franelita escurrida y húmeda hay que limpiar la superficie de madera. Después de ello, hay que secar casi inmediatamente, debido a que si no lo haces, corres el riesgo de que el agua o jabón traspase la madera de tus muebles y provoque que se hinche, sobre todo, si es madera delgada. Recuerda que el trapito con el que limpiarás no debe de estar muy mojado a la hora de pasarlo sobre el mueble de madera. 

2. Mezcla bicarbonato y jabón con poquita agua

Para que las manchas difíciles se quiten, es muy importante que hagas esta mezcla con poca agua, la apliques sobre donde está la suciedad y luego secas con la franela. Si por alguna razón, la mancha persiste, lo mejor será usar un cepillo seco, pero al terminar de tallar, hay que limpiar con la franela, para que no quede ningún exceso de jabón o solución con lo que estés limpiando la madera. 

3. Escurre muy bien tu trapito

Siempre que sientas que la franela pasa de mojada a húmeda, pues hay que exprimirla y dejar que se seque un poco, porque recuerda que estamos tratando de evitar el agua. 

4. Usa un spray con aceite para madera

Si las manchas son menores, puedes optar por rociar o untar el aceite para limpiar madera, pasar con una franela seca y ¡Ya está!