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5 consejos de la UNESCO para una alimentación saludable durante la pandemia

La UNESCO compartió cinco consejos para cuidar la salud física y emocional de la población que se enfrenta a esta crisis sanitaria
domingo, 14 de junio de 2020 · 17:02

Debido a la contingencia sanitaria por la pandemia de la Covid-19, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO, por sus siglas en inglés) compartió cinco consejos para que la población cuide su salud durante esta pandemia, los cuales están centrados en la alimentación debido a la importancia de mantener la salud, el sistema inmunológico protegido y no bajar la guardia ante otros padecimientos.

El organismo señaló que entre "el desempleo y la pérdida de ingresos hacen que comprar alimentos suponga una mayor presión económica", debido a que las cabezas familiares enfrentan retos como idear rutinariamente los menús para las comidas del día a día, al tiempo que deben trabajar desde casa o buscar el sustento y las interrupciones en los sistemas de suministro de alimentos por la contingencia.

Consejos para mantener una alimentación saludable

1. Comer fruta y verdura

Debido a este contexto, en el que comprar, almacenar y cocinar verdura fresca se complica durante un aislamiento, así como las limitaciones para salir, pueden orillar a la población en el consumo de platillos preparados y productos procesados de forma rápida y barata; sin embargo, la UNESCO aconseja que en la medida de lo posible se aseguren de que la dieta de los menores incluya una cantidad suficiente de frutas y verduras, así como buscar productos frescos. Señalaron que en el caso de utilizarla para cocinar sopas, caldos u otros platos en grandes cantidades se conseguirá que duren más, con mayor variedad y que puedan ser congelados para recalentarlos rápidamente.

2. Alimentos deshidratados o en conserva

Una opción de la que habla el organismo es que en caso de no conseguir productos frescos, se busquen alternativas saludables para preparar y almacenar como los alimentos deshidratados y en conserva. En este sentido mencionan a los frijoles y garbanzos en conserva, los cuales aportan abundantes nutrientes, pueden almacenarse durante meses e incluso años y se pueden incluir en diferentes guisos; mientras que el pescado azul en conserva como las sardinas, la caballa o el salmón, son ricos en proteínas, ácidos grasos omega 3 y una variedad de vitaminas y minerales.

Este tipo de conservas pueden ser utilizados en platillos fríos o calientes. Por su parte, los alimentos deshidratados como los frijoles, las legumbres y los cereales deshidratados entre los que se cuentan las las lentejas, el arroz, el cuscús o la quinua, resultan opciones nutritivas y duraderas que no sólo son sabrosas, sino también asequibles y sustanciosas. A esto agregan la avena que cocinada con leche o agua es una excelente opción para el desayuno.

3. Mantener reservas de aperitivos saludables

La UNESCO apunta que para mantener activos a los menores, es indispensable la ingesta de uno o dos refrigerios al día, por lo que debe considerarse buscar opciones saludables y no optar por dulces o botanas saldas de producción industrial. Entre algunas sugerencias señalan los frutos secos, queso, yogurth (de preferencia sin azúcar), fruta troceada o deshidratada o huevos cocidos. Indicó que estos alimentos son nutritivos, sacian más y contribuyen a crear hábitos saludables para toda la vida.

4. Limitar los alimentos muy procesados

Aunque no siempre es posible utilizar productos frescos, se debe limitar la cantidad de alimentos muy procesados en la lista de compras, pues este tipo de alimentos, postres o refrigerios tienen un alto contenido de grasas saturadas, azúcares y sal, los cuales producen enfermedades crónico degenerativas a la distancia y disminuyen las defensas del sistema inmunológico. De igual forma, aconsejan preferir el consumo de agua natural en lugar de bebidas azucaradas u optar por aguas de frutas naturales.

5. Crear una rutina divertida y familiar de cocina

Como un medio para fortalecer lazos familiares y crear rutinas saludables, la UNESCO promueve que la cocina se a un espacio en el que se invite a los menores a participar en la preparación de los alimentos, ya sea organizando, lavando o haciendo tareas más complejas según la edad de los miembros de la familia. De igual forma, establecer horarios fijos para comer contribuirá a reducir la ansiedad durante esta emergencia sanitaria.