Masterchef Celebrity está cada vez más intenso y las salidas de las celebridades se hacen cada vez más difíciles. A partir de este momento el 'juego sucio' como muchos aseguran, ha comenzado, y de esa misma forma cualquier error podría traer graves consecuencias. Tales como las que le sucedieron a Anabel en su último reto donde se convirtió en la 11va expulsada.
El pasado 8 de junio, Masterchef Celebrity buscó hacer algo épico y para ello trajo de vuelta a algunos de los participantes más icónicos que han pasado por la cocina más famosa. Entre ellos la querida hermana y madre superiora, Flor, Roy y Jawy, este último quien se convertiría en la pareja de Anabel Ferreira en el reto de salvación.
La idea era ayudarle a preparar un platillo que originalmente a Jawy, en su temporada, le había convertido en uno de los mejores cocineros y, en aquel entonces, llevado a la final del reality culinario. Sin embargo, el problema llegó cuando empezaron a cocinar y la señora Anabel, mostró ciertas formas peculiares en las que no se dejaba guiar del todo.
La intención del también participante de realities, era intentar recrear un platillo que en el pasado le había dado grandes satisfacciones y que le había conseguido regresar al balcón. Aunque se mostró muy atenta para realizarlo, el problema se presentó cuando no se dejaba guiar del todo para cocinar la receta.
El primer momento fue al intentar cocinar los espárragos, donde Jawy le destacó que solo la intención era ayudarse a quitarle un poco lo crudo y, posteriormente, seguir con la cocción envueltos en tocino. Pese a esto, ella se aferró en su postura de la que creía que debía dejarlos por un periodo arriba; el resultado, espárragos sobre cocidos.
Al final la carne fue algo que gustó a los jueces, sobre todo, al chef Herrera que destacó nuevamente las habilidades culinarias en cortes a Jawy y le aplaudió el tener un resultado tan bueno como lo recordaba en su momento en su paso por el reality culinario.
¿Realmente era el eslabón más débil?
Pese a lo que muchos critican en redes sociales, la realidad con Anabel es que siempre se mostró como una mujer que no le tuvo miedo a cocinar. Podría o no tener los conocimientos de algunos de sus compañeros, pero nunca se dejó vencer por lo que le pusieran al frente. Incluso, en la última cocinada demostró que no importaba lo que sucedía con sus compañeros, en realidad lo importante era como ella lo iba a solucionar.
"Yo no puedo controlar lo que pasa en la cabeza de Plutarco, eso es cosa de ellos, lo que si tengo bajo mi control es lo que puedo yo hacer con esto y la forma de solucionarlo", respondió.
Ante esto, las reacciones en redes sociales no se hicieron esperar y aplaudieron la inteligencia emocional con la que contaba Anabel, misma que aseguraron fue única porque nunca se mostró parte de un juego 'sucio' aunque parecían por momentos que realmente podría caer en provocaciones.
