En la más reciente emisión de MasterChef Celebrity Generaciones, las tensiones en la cocina alcanzaron su punto más álgido. Carlos Quirarte fijó su objetivo directamente en Plutarco Haza, luego de sentirse traicionado en un episodio anterior donde estuvo al borde de la eliminación. Para Quirarte, la estrategia de Plutarco fue un golpe bajo, y desde entonces, la tensión entre ambos ha ido escalando.
Todo comenzó cuando Plutarco, en posesión del Pin del Chef, asignó ingredientes complicados a varios de sus compañeros durante un reto de eliminación, incluyendo a Carlos. A este último le tocó cocinar un corte de carne que no domina, lo cual interpretó como un ataque directo. Plutarco, por su parte, explicó que solo buscaba proteger a Ofelia Medina y que las asignaciones no fueron personales. Sin embargo, desde ese momento, la relación entre ambos se volvió más tensa que una final entre Cristiano Ronaldo y Lionel Messi.
La rivalidad de esta nueva temporada de MasterChef Celebrity estalló en el episodio más reciente durante la formación de equipos. Esta vez, Quirarte fue quien ganó el Pin del Chef y no dudó en dejar clara su intención: eliminar a Plutarco. Al formar los equipos, no solo lo puso en desventaja, sino que además declaró abiertamente que lo considera “el más débil” del grupo, avivando aún más la polémica entre los participantes y la audiencia.
¿Cuál fue la táctica de Carlos Quirarte?
En una jugada táctica, Quirarte le asignó a Plutarco la preparación de una sopa tarasca, uno de los platillos más complejos del reto, mientras que a Rafa Polinesio le dio una receta más sencilla. La estrategia buscaba debilitar a Plutarco y favorecer al influencer, pero no le salió como esperaba. Quirarte dejó clara su postura:
“Mi intención más que nada es mandar al Mandil Negro a Plutarco […] el más débil es Plutarco Haza.”
El conductor de televisión ha sido enfático al declarar que no quiere enfrentarse a los más “débiles” en la recta final, y que prefiere competir con los más fuertes. Por eso, afirmó que su objetivo es sacar a Plutarco lo antes posible, pues no lo considera un rival digno para las últimas etapas del reality.
Por su parte, Plutarco ha mantenido la calma, asegurando que nunca actuó con mala intención y que simplemente intentó proteger a una compañera. Considera que ha sido injustamente señalado por una estrategia que, desde su perspectiva, fue equitativa. El conflicto ha transformado la cocina en un verdadero campo de batalla emocional. El futuro de ambos en la competencia está en juego, y esta rivalidad podría ser decisiva en el camino hacia el mandil final.
