En México, la comida es parte esencial de nuestra cultura. Muchos platillos se han transmitido de generación en generación, y aunque algunos tienen siglos de historia, otros son más recientes. Con el paso del tiempo, se han adoptado recetas y sabores que ya consideramos parte de nuestra gastronomía, aunque en realidad no nacieron aquí.
La gastronomía mexicana ha sabido tomar lo mejor de muchas culturas. Desde ingredientes que llegaron con los españoles, hasta preparaciones que se transformaron con el paso de los años, muchos platillos tienen un origen más internacional de lo que creemos. Y sí, algunos de ellos te van a sorprender.
Por eso, aquí te contamos sobre 4 alimentos que seguramente pensabas que eran 100% mexicanos, pero que tienen su origen en otros países. No es que los hayas estado comiendo "mal", al contrario, en México les dimos un giro tan sabroso que ahora se han vuelto parte de nuestra identidad.

Chimichanga
Si pensabas que las chimichangas eran un antojo norteño de origen mexicano, lamentamos decirte que no es así. Este platillo es originario del suroeste de Estados Unidos, específicamente de Tucson, Arizona. Se trata de un burrito frito, relleno de carne, arroz, frijoles y queso, muy popular en la comida tex-mex.
Churros
El origen de los churros viene de China, posteriormente los portugueses lo llevaron a la península ibérica, donde los pastores preparaban esta masa frita como una alternativa rápida al pan. Cuando los españoles llegaron a México, trajeron consigo esta receta que fue adaptándose al gusto local. En nuestro país, los churros adquirieron un estilo único: más gruesos, más crujientes y, claro, con un toque de canela
Agua de horchata
¿Team jamaica o team horchata?.. Es común encontrar el agua de horchata en taquerías, mercados y fonditas, y la damos por mexicana sin pensarlo. Sin embargo, la horchata viene de mucho más lejos: su origen es español. La horchata original se hace con chufa, una semilla que no crece en México. Cuando la receta llegó aquí, se adaptó con arroz, canela y vainilla, convirtiéndose en una de las bebidas más populares del país.

Tacos al pastor
Este sí sorprende. Aunque los tacos al pastor son un clásico de la CDMX y de muchas otras ciudades, tienen raíces libanesas. A mediados del siglo XX, migrantes del Medio Oriente trajeron a México su técnica de preparar carne en un trompo vertical, como el shawarma.
Con el tiempo, esta técnica se mezcló con ingredientes locales como el achiote, el cerdo y la piña, y nació el taco al pastor tal y como lo conocemos. Hoy es imposible pensar en la cocina mexicana sin este platillo, aunque su historia comenzó muy lejos de aquí.